Qué es mejor para el lavavajillas: detergente en polvo, gel o pastillas
¿Cómo eliges el detergente que usas en el friegaplatos? Es importante saber cuál utilizar, porque hay varios factores que influyen en la decisión.
Los lavavajillas modernos utilizan diferentes tipos de detergente. Y además todos ellos admiten todos los tipos. Es decir, no estás obligado a elegir uno u otro según el modelo de lavaplatos que tengas.
La realidad es que la mayoría de los usuarios eligen el tipo de detergente más barato, o el más cómodo de usar. No es una buena decisión.
Según explican los expertos de Apartment Therapy, la elección del detergente depende de dos cosas: el tipo de vajilla que usemos, y el tipo de agua de nuestra localidad. Vamos a ver los pros y los contras de cada uno.
Es una decisión que no hay que tomar a la ligera, pues ayuda a aumentar el ciclo de vida del lavavajillas, ahorra agua, y deja los platos más limpios y brillantes.
Estos son los tipos de detergente para lavavajillas más usados, de peor a mejor.
Gel o detergente líquido
Es el menos recomendado por los expertos, porque al ser líquido se disuelve enseguida con el primer agua que recibe, y su eficacia limpiadora desaparece.
Además el gel no puede llevar los dos compuestos más usados a la vez: lejía y enzimas. En forma de líquido solo puede estar uno. En cambio, las pastillas sí llevan ambos compuestos.
Aún así, es la mejor opción si vas a lavar una vajilla muy delicada, porque es el menos agresivo. Tenlo en cuenta cuando laves esos platos de cerámica de las grandes ocasiones...
Detergente el polvo
Es una opción cada vez más en desuso. Como el gel, también se disuelve rápido, aunque dura más.
Eso sí, es el más recomendado si vives en una zona con agua dura, que contiene muchos minerales. Este tipo de agua tiende a dejar manchas blancas en los vasos y platos de cristal o plástico. El detergente en polvo es el que mejor elimina estas manchas.
Pastillas
Son las más usadas en la actualidad, porque realmente son las más efectivas, salvo en el caso del agua dura y las vajillas delicadas.
Su gran ventaja es que se disuelven poco a poco, así que pueden limpiar a fondo durante todo el ciclo de lavado, y no solo al principio.
Además muchas pastillas también llevan gel.
Ahora que ya sabes cuál te va mejor, elige con cabeza y sacarás un mayor provecho al friegaplatos.
Otros artículos interesantes:
- Mitos sobre el lavavajillas que pueden causarte más de un disgusto
- El lavavajillas de Lidl arrasa y arrastra a su sector: estas son las principales alternativas
- Usos alternativos del detergente para la ropa que te resultarán muy útiles
- Silla ergonómica Sihoo Doro S300: la tecnología más avanzada al servicio del mejor diseño y la máxima comodidad
Descubre más sobre Juan Antonio Pascual Estapé, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Computerhoy.