Cuando hace dos años se eliminó el conocido como 'impuesto al sol' parecía que se iba a disparar el autoconsumo en los hogares españoles, pero este es un cambio que exige de inversión y disponer de los materiales necesarios para poder llevarlo a cabo. Afortunadamente, parece que en Ikea se pondrán al venta los paneles solares que ya comercializan en otros países.

En Cinco Días se ha informado sobre el acuerdo al que han llegado Ikea y Contigo Energía. Este servirá para fomentar la venta de paneles solares en España, un producto que no es tan sencillo de instalar como se puede pensar y requiere cumplir unos requisitos y adaptarse a la normativa.

Lo primero que se debe saber es que los precios de los paneles solares partirán de los 4.170 euros y se pondrán a la venta a finales de este trimestre, por lo que serán asequibles y ya casi están en nuestras manos. Pero la mayoría de clientes pueden necesitar de ayuda para instalarlos.

Los paneles de Ikea son conocidos como Solsträle y se venden en al menos nueve países más. De cara a potenciarlos en España, se ofertará la opción de trabajar con un servicio de atención al cliente que los instale o ayude en las gestiones necesarias. Este es un mecanismo que ha ofrecido también en otros países, ya que montar un mueble no es lo mismo que instalar una fuente de energía en el hogar

Dentro del precio de venta estará la asistencia para crear el sistema que necesite el cliente, tanto a nivel de suministro como de instalación o garantías de seguridad. Aunque a la larga suponga un ahorro en la factura de la luz, se requiere de una inversión en distintos aspectos a la hora de realizar el montaje.

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Desde Ikea informan a Cinco Días sobre estos paneles y que el sistema "no solo contribuye a minimizar el impacto del consumo desde un punto de vista medioambiental, sino también el del gasto de las familias que verán reducida su factura de la luz hasta un 50%, un atributo que puede ser de gran valor en el contexto actual”. Está bien recordar que estas semanas la factura de la luz resulta especialmente discutida por sus altos precios.

Veremos si la venta por parte de Ikea consigue que también despeguen los paneles en otras tiendas. Resulta complicada su instalación en edificios de vecinos, al menos en comparación con los unifamiliares, pero seguro que de algún modo se acaba potenciando esta opción de autoconsumo, sea por ahorro o por sostenibilidad.