Los matices y cambios en la guerra comercial no dejan de llegar, todo el conflicto entre Estados Unidos y China cuyas consecuencias se ven principalmente en los aranceles y Huawei muta de un día para otro. En esta ocasión, con una buena noticia para el fabricante chino.

Hace unos meses, el gobierno prohibió a empresas como Google y Microsoft trabajar con Huawei. Consecuencia de ello es que el Huawei Mate 30 Pro haya llegado sin ninguna herramienta de Google, por ejemplo. Pero también afectaba a los portátiles de Huawei que tenían que venderse sin Windows, el sistema operativo de cabecera para gran parte de la población.

Ahora, además de la prórroga de tres meses que se ha concedido, parece que el Departamento de Comercio de Estados Unidos permite a Microsoft vender su sistema operativo a Huawei.

Las víctimas de la guerra comercial entre Trump y China: ZTE, Huawei y las que vendrán

La ruptura entre Google y Huawei es el último paso en una guerra comercial recrudecida desde la presidencia de Donald Trump. En la campaña electoral ya puso como objetivo limitar el negocio de las grandes empresas chinas en su país. Os explicamos las medidas que ha tomado en los últimos años.

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Según comunicó un representante de Microsoft: “El 20 de noviembre, el Departamento de Comercio de EE. UU. concedió la solicitud de Microsoft de una licencia para exportar software de consumo masivo a Huawei. Apreciamos la acción del Departamento en respuesta a nuestra solicitud".

Aunque no dice qué programa es en concreto, el término software acoge tanto Windows como Office, por lo que se vuelven a abrir ambos caminos de ingresos para la empresa.

A pesar de que ha pasado más desapercibido que con los móviles, el bloqueo a Huawei ha perjudicado de gravedad a la venta de ordenadores de la empresa: vender portátiles sin Windows ha sido un handicap importantísimo para su negocio en esta área.

Una vez reabierta esta puerta, queda por saber qué ocurrirá con otros bloqueos, como el que sufre Intel, que no puede venderle chips de ordenador a Huawei. Como es de esperar, es una trama que va para largo.