Desde la poción de invisibilidad de H. G. Wells a la capa de Harry Potter, el ser humano ha soñado desde hace siglos con desaparecer. Hasta ahora solo era una fantasía, pero poco a poco se está convirtiendo en realidad.

Hace tres años presentamos el primer escudo de invisibilidad de la compañía canadiense Hyperstealth Corporation. Ahora lo ha perfeccionado para hacerlo más real y más "transparente".

Este escudo usa un material llamado Quantum Stealth, que vuelve invisible todo lo que se coloca detrás. No es perfecto, porque difumina un poco el fondo y necesita que el objeto a ocultar esté justo en medio del escudo de invisibilidad, pero realmente funciona. Puedes verlo en este vídeo:

La gran ventaja de Quantum Stealth es que no requiere ningún tipo de energía, es el propio material con el que está fabricado el que vuelve invisible lo que hay justo detrás, pero no el fondo más lejano.

¿Como funciona este panel de invisibilidad? Se basa en las clásicas lentes lenticulares. Seguro que has visto alguna vez el efecto 3D que tienen algunas portadas de libros, o algunas carátulas de películas en DVD o Blu-ray, que generan una imagen 3D si la miras de frente, y se vuelve plana si la ves desde los lados.

Este escudo de invisibilidad altera la luz siguiendo los parámetros de la Ley de Snell, que calcula el ángulo de refracción de la luz al atravesar la superficie de separación entre dos medios.

Todo objeto tiene un índice de refracción de la luz, y lo vemos distinto si la luz atraviesa el aire, u otro medio como el agua. Es un efecto fácil de comprobar: si metemos una cuchara en un vaso de cristal lleno de agua, vemos la cuchara doblada. Además su forma cambia según desde donde miremos.

Hyperstealth ha aprovechado todos estos conceptos para crear un material que dobla la luz y permite crear puntos ciegos a cierta distancia del escudo de invisivilidad. Por eso vuelve invisible lo que está muy cerca del escudo, pero no lo que está más lejos.

No es la única compañía que trabaja en esta tecnología. Invisibility Shield Co presentó hace unos meses otro panel de invisibilidad que funciona de forma muy similar, aunque es incluso más perfecto. Puedes verlo aquí:

Además, está a la venta en KickStarter. Un escudo pequeño de 30 x 20 cm para ocultar objetos cuesta alrededor de 57 euros, mientras que un escudo para ocultar a una persona, de 95 por 65 cm, sube a 350 euros.

No es una solución perfecta, pero sí tienes sus aplicaciones en camuflaje militar, estudios científicos de animales en libertad, privacidad, etc.