Las memorias USB y las tarjetas microSD se han convertido en piezas clave en un momento en el que el almacenamiento es esencial para todos. Sin embargo, un informe reciente de la empresa alemana de recuperación de datos CBL ha informado sobre una gran bajada de calidad de estos dispositivos, especialmente en lo que respecta a los chips NAND utilizados en la fabricación de estos.

Para contextualizar un poco previamente, explicar que estos chips son pieza clave en memorias USB, tarjetas de memoria, SSD, y otros dispositivos de almacenamiento digital. En pocas palabras, se componen de celdas de memoria que almacenan información de forma permanente, lo que significa que conservan los datos incluso cuando no están recibiendo energía.

Además de su capacidad de almacenamiento, también son conocidos por su velocidad de lectura y escritura, lo que los hace perfectos para aplicaciones que requieren un acceso rápido a los datos, como los SSD usados en ordenadores y servidores.

Teniendo esto como base y volviendo al informe, CBL ha encontrado chips NAND de marcas como Hynix, Sandisk y Samsung que no superaron los estándares de calidad y que fueron revendidos y reutilizados. 

Chips NAND defectuosos invaden el mercado de dispositivos de almacenamiento

Comentan que, aunque estos chips siguen funcionando, su capacidad de almacenamiento es bastante cuestionable, sobre todo si se habla de largo plazo. 

El director general de CBL Datenrettung GmbH, Conrad Heinicke, ha destacado que muchas de estas memorias USB defectuosas las encontraron en regalos promocionales y algunos productos de "marca", lo que sugiere que esta baja calidad no está limitada solo a productos genéricos.

"Cuando el año pasado abrimos memorias USB defectuosas, encontramos una cantidad alarmante de chips de memoria de mala calidad, con capacidad reducida y con el logotipo del fabricante retirado del chip", explica. 

Esto es algo que con anterioridad se ha podido comprobar. En 2022, un SSD externo M.2 genérico de 30 TB podía comprarse por unos 18 dólares en Walmart. La realidad es que contenía dos tarjetas SD de 512 MB pegadas a la placa y su firmware se había modificado para informar que cada una era de 15 TB, cuando, como ves, no es así.

Todos estos factores ha llevado a CBL a advertir muy seriamente sobre la calidad de estos productos y la importancia de que el usuario sea muy cauteloso a la hora de comprar estos dispositivos.