Se mire por donde se mire, envejecer no acostumbra a ser del agrado de nadie. Quizá por eso cada día salgan más dietas y costumbres enfocadas, al menos en teoría, a ralentizar el envejecimiento y vivir más. Incluso cada día es más frecuente estudiar qué comen aquellos lugares del mundo con mayor índice de longevidad, como sucede con Japón o la llamada dieta atlántica.

Sin embargo, algunos expertos apuntan en otra dirección: lo importante no sería tanto lo que se come (que también) sino la cantidad de veces que se hace el día. En concreto, ciertos estudios consideran que la mejor forma de retrasar el envejecimiento sería comiendo solamente dos veces al día. ¿En qué se basan para afirmar estas conclusiones? 

Comer dos veces al día podría retrasas el envejecimiento

Tradicionalmente, al menos en España, lo más normal es llevar a cabo cuatro o cinco comidas al día: desayuno, comida, merienda y cena. A veces, también almuerzo o algún que otro “picoteo” entre horas. Sin embargo, tal y como señalan algunos estudios, existe la posibilidad de que comer dos veces al día podría no solo ayudar a adelgazar, sino también retrasar el envejecimiento. 

Sus razonamientos son bastante sencillos. Por ejemplo, se ha sugerido que comer con menos frecuencia puede reducir el estrés oxidativo en el cuerpo, un supuesto factor que contribuye al envejecimiento. Este se produce cuando hay un desequilibrio entre la producción de radicales libres y la capacidad del cuerpo para neutralizarlos con antioxidantes. 

Es algo, hasta cierto punto, similar a lo que sucede con el ayuno intermitente, tan de moda de un tiempo a esta parte (y que tiene tantos simpatizantes como detractores). De hecho, comer dos veces al día bien podría considerarse una especie de forma de practicar el ayuno intermitente. Teóricamente, así se mejoraría la promoción de la autofagia, un proceso celular de limpieza y reparación.

Hay que tener presente, eso sí, que muchos de los experimentos que se han llevado a cabo en este sentido a nivel científico no están comprobados en humanos. La restricción calórica moderada se ha asociado con frecuencia con una vida útil extendida en animales, pero su efecto no se ha estudiado todavía lo suficiente como para saber el impacto en personas, al menos a nivel científico.

Los expertos son prudentes

Aunque cada vez es más habitual escuchar a gente decir que comer dos veces al día ayuda a retrasar el envejecimiento, los expertos son prudentes a la hora de pronunciarse. Es cierto que algunos lo han defendido abiertamente (incluso existen algunos libros recientes centrados en esta cuestión), pero siempre suele haber más cosas que tener en cuenta. 

Por ejemplo, está el hecho de que no todo el mundo es igual, ni requiere el mismo tipo de dieta. Es verdad que en ocasiones los consejos generales son inevitables, pero siempre partiendo de la base de que cada organismo es un mundo, y lo que sienta de maravilla a alguien no tiene por qué funcionar en su vecino. Más o menos lo que suele decirse del ayuno intermitente.