Si lo piensas con detenimiento, es fácil darse cuenta de por qué cada día existen más perfiles falsos en redes sociales. Por ejemplo, sirven para “engordar” la lista de seguidores de quien sea y así parecer más popular. O, cómo no, para despotricar sobre alguien sin tener que dar la cara, procurando así hacer fuerza en una de las muchas discusiones que surgen en Internet.

Sin embargo, hay ocasiones en las que el asunto se vuelve todavía algo más serio: cuando se utilizan para estafar directamente a los usuarios. Por eso, aprender a detectar un perfil falso en redes sociales nunca está de más. Aquí te dejamos las 3 mejores formas de hacerlo, para que no te engañen. 

Cosas que “cantan” de un perfil falso

Una de las mejores maneras de detectar un perfil falso de una red social pasa por detectar tanto sus datos como la forma en que interactúa con la plataforma (ya sea Instagram, Facebook o la que sea). Primero, presta atención a la foto. Lo más normal es que esta sea genérica o robada. A una celebridad, en según qué casos, pero más probablemente a un usuario cualquiera.

Los perfiles falsos tienden a tener información de perfil limitada o inconsistente. Fíjate en detalles como la fecha de creación de la cuenta, la biografía y la cantidad de amigos o seguidores. Los perfiles de verdad acostumbran a resultar más o menos coherentes en muchos sentidos, incluso aquellos que menos se utilizan; cuando son “fake” no suelen. 

Una interacción extraña con los demás

Salvo en casos concretos, hay que reconocer que muchos de los perfiles falsos que hay en redes sociales no están muy trabajados. Algo que ni solo se aprecia en su composición, sino en otro aspecto clave: la manera en la que interactúan con las publicaciones de los demás. Sus comentarios suelen ser terriblemente repetitivos y genéricos, muy poco creíbles. 

Por ejemplo, ¿quién en su sano juicio respondería constantemente cosas como “hermosa foto”, una y otra vez? Además, y a pesar de todo ello, es también muy común que los perfiles falsos de redes sociales tengan muchísimos seguidores, en proporción con la gente a la que ellos mismos siguen. Tiene lógica, puesto que suele ser su principal razón de ser.

Compruébalo por ti mismo

A veces, es cierto eso de que una imagen vale más que mil palabras. Si quieres estar seguro de que un perfil es falso, simplemente guarda su imagen de perfil. Acto seguido, búscala utilizando la herramienta Google Images. Si la imagen aparece repetida en diversos perfiles con nombres distintos (y generalmente en plataformas diferentes), está bastante claro. 

Ten en cuenta que, por poco romántico que suene, en Internet mucha gente no es quien dice ser, por diversas razones. Y menos hoy en día, con la inteligencia artificial y muchas otras herramientas al alcance de la mano de cualquiera. Eso de “ver es creer” ya no sirve como antes. De hecho, cada vez será más importante saber interpretar qué es lo que se ve realmente.