Un nuevo y perturbador fraude está ganando terreno, especialmente en páginas web de contenido para adultos. Conocido como el fraude del sicario o proxeneta, esta estafa implica una compleja trama de extorsión y miedo. 

Según información proporcionada por el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), este fenómeno está en auge, siendo un claro ejemplo de cómo los ciberdelincuentes explotan las vulnerabilidades humanas.

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Los afectados reciben un mensaje en WhatsApp de un número desconocido. El remitente alega ser un proxeneta o un sicario, le acusa de haber causado problemas a una mujer de compañía y exige una suma considerable de dinero para evitar "consecuencias graves". 

Estas amenazas van acompañadas de imágenes gráficas y videos de violencia extrema para intensificar el miedo. Son muy efectivas.

Los ciberdelincuentes roban los datos en páginas de citas o pornografía

Los testimonios recogidos por INCIBE revelan que muchas víctimas admiten haber visitado sitios de citas de prostitución o páginas de pornografía, aunque niegan cualquier interacción directa. Aquí radica la astucia de los estafadores: publican anuncios falsos en estos sitios, esperando a que un usuario muerda el anzuelo. Una vez tienen su número de teléfono, comienza el juego de la extorsión.

La clave para enfrentarse a esta amenaza es no ceder ante el miedo. INCIBE recomienda no seguir las instrucciones del estafador, reportar y bloquear el número, no compartir datos personales o bancarios, y recopilar evidencias en caso de acoso persistente. 

También es crucial practicar el egosurfing, es decir, buscar en internet qué información personal suya está disponible públicamente.

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Estos delincuentes pueden contactarle de múltiples maneras, incluyendo mensajería en línea, llamadas telefónicas, correos electrónicos, mensajes de texto y a través de redes sociales. Utilizan la ingeniería social y variados trucos para infundir miedo y sacar dinero.

La conclusión es clara: aunque estas amenazas suenen aterradoras, por lo general, el objetivo de estos criminales es meramente económico. Mantener la calma, no ceder al chantaje y buscar ayuda de las autoridades es esencial para lidiar con esta situación. Compartir esta información es vital para prevenir que más personas caigan en esta trampa.

Para más detalles sobre cómo protegerse de estos y otros tipos de fraudes, INCIBE ofrece una amplia gama de recursos en su portal web. En tiempos donde la seguridad en internet es primordial, estar informados es nuestra primera línea de defensa.