La portentosa imaginación del ser humano está fuera de toda duda. Muchos procesos, ya sean estos naturales o creados por la mano del hombre, han recibido los nombres y las imaginaciones más fantásticas desde los albores de los tiempos. 

Algo que ahora se confirma con los bautizados como “círculos de las hadas”. Pero ojo, porque en este caso concreto su fabulosa denominación puede llevar a equívocos. 

Es inevitable que al pensar en los círculos de las hadas a uno no le vengan a la memoria los supuestamente misteriosos círculos de las cosechas. Otro fenómeno que, si bien viene de antiguo, alcanzó una gran popularidad a partir de la década de los setenta en muchos lugares del mundo. 

Aunque los círculos de las cosechas o de los cultivos se demostraran fraudulentos en la mayoría de los casos (algunos de sus supuestos autores, incluso, confesaron su mano detrás del misterio), todavía hoy muchos estudiosos del misterio y lo paranormal continúan incluso asociándolos con avistamientos extraterrestres. Incluso han inspirado películas como “Señales”, de Night Shyamalan.

Pero a pesar de las posibles semejanzas y su llamativo nombre, los círculos de las hadas tienen un origen mucho más definido, y los científicos se han mostrado claros y contundentes en el asunto. Pese a todo, existen diversas teorías al respecto. 

¿Qué son los misteriosos círculos de las hadas?

Básicamente, los círculos de las hadas consisten en formaciones circulares, habitualmente aparecidas en lugares áridos y desérticos, curiosamente rodeadas de vegetación.

Originalmente descubiertos en el desierto africano de Namib, este curioso fenómeno natural comenzó a llamar la atención de científicos (e investigadores) cuando se replicó en lugares tan apartados como Estados Unidos o Australia. 

Otro detalle significativo de los círculos de las hadas, es que estos acostumbran a seguir un patrón hexagonal, lo que dibuja figuras de diferentes tamaños bastante sorprendentes en el suelo. Los propios angoleños llamaban a esta particularidad “huellas de los dioses”, otorgándole una naturaleza mística.

Un origen comprensible… hasta cierto punto

Nadie parece discutir, ni siquiera los más fervientes apasionados de las teorías esotéricas que los círculos de las hadas tienen un origen natural, por así decirlo. Pero pese a la claridad de los científicos en llegar a este punto, no existe tanta unanimidad a la hora de determinar su origen. 

Los círculos de las hadas (cuyo nombre fue decidido por la comunidad científica, al contrario de lo que pueda parecer, por no ningún loco del misterio) llevan investigándose desde hace ya varias décadas. Poco a poco, las teorías han ido tomando forma; algunas similares entre sí, pero otras no tanto. 

El hecho de que los círculos de las hadas aparezcan siempre en desiertos o terrenos con poca agua, parece dar pistas a los expertos en la materia, que suelen inclinarse a pensar en las acumulaciones de aguas subterráneas y los procesos de drenaje naturales como causa más probable de su aparición. 

Tampoco se descarta un comportamiento atípico de las plantas al competir por los escasos nutrientes de estos suelos. 

Otra hipótesis que suena con fuerza, en cambio, tiene que ver con los insectos. Según el biólogo alemán Norbert Jürgens, las termitas de tierra, en su esfuerzo por encontrar alimento, sería las culpables de generar las pintorescas formas circulares. 

Una teoría que, como las demás, todavía no se ha confirmado. Mientras no sea así, seguro que continúan surgiendo todo tipo de explicaciones, por fantásticas que resulten.