Resulta inevitable: al pensar en los premios Óscar que cada año concede la academia de Hollywood, siempre vienen a la cabeza algunas de las películas que más estatuillas lograron reunir. 

Casos como Titanic, El señor de los anillos, Ben-Hur o la más reciente, Oppenheimer. Quién más y quien menos, todo el mundo puede recordar cuáles han sido los largometrajes de mayor éxito. 

¿Pero y si la memoria jugara en ocasiones una mala pasada? Existen producciones consideradas míticas, y que suelen asociarse con multitud de premios, pero que en realidad no recibieron galardones, al contrario de lo que se piensa. Aquí te dejamos 5 grandes películas que no tuvieron ningún Óscar, aunque quizá pienses que sí.

Taxi Driver (1976)

Considerada por muchos cinéfilos como una de las mejores películas de la historia del cine, Taxi Driver consolidó a Robert de Niro como una estrella absoluta de Hollywood y recibió todo tipo de elogios en su día… pero no ganó ningún Óscar. 

Mucha gente en ocasiones se confunde, puesto que sí estuvo nominada como mejor película y mejor actor, dos premios que para muchos tanto De Niro como el director Martin Scorsese merecieron con creces llevarse a casa.

El padrino III (1990)

Un caso similar es el que supuso la tercera parte de El Padrino. Aunque la última entrega de la mítica saga de los Corleone siempre se ha visto un par de escalones por debajo de las dos primeras, lo cierto es que también tuvo varias nominaciones, y bien podría haber ganado algún que otro Óscar.

Al final no fue así, y esta vez Coppola y el equipo responsable de la película se volvieron a casa con las manos vacías.

El último tango en París (1972)

Dirigida por Bernardo Bertolucci y protagonizada por Marlon Brando, El último tango en París suele ser definida como una obra maestra absoluta. 

La peculiar historia de amor entre sus dos protagonistas exploró las relaciones de pareja, la soledad, la lujuria y los fetiches, pero no convenció a la academia de Hollywood.

Aunque estuvo nominada en las categorías de mejor director y mejor actor, al final ni siquiera Marlon Brando pudo repetir la suerte que si tuvo con El padrino y La ley del silencio. 

Psicosis (1960)

A estas alturas, todo el mundo conoce Psicosis, la gran joya de Alfred Hitchcock que marcó un antes y un después dentro del cine de suspense y de terror. 

En su momento, logró cuatro nominaciones a los premios Óscar, pero sorprendentemente tampoco se llevó ninguno. De hecho, ni siquiera se contempló entre las candidatas a mejor película.

Lo que queda del día (1993)

Esta adaptación de la novela de Kazuo Ishiguro lo tenía todo para arrasar en los Óscar: una fantástica historia de época con drama y romance, un reparto de lujo (con intérpretes de la talla de Anthony Hopkins, Emma Thompson o Christopher Reeve) y una brillante dirección a cargo de James Ivory. 

De hecho, en 1993 era la gran favorita a arrasar en los premios, más que nada porque tuvo 8 nominaciones. Al final, tampoco logró ni siquiera una estatuilla. 

¿Es siempre la academia de Hollywood siempre justa a la hora de otorgar sus premios? Probablemente no, o al menos no, siempre lo haga de la forma más lógica. Solo hace faltar recordar estos celebrados films para darse cuenta de ello.