Un vídeo muestra cómo queman un robotaxi de Google en San Francisco, entre aplausos de la multitud
Michael Vandi / X
- Un coche sin conductor de Waymo que circulaba por una calle de San Francisco, ha sido atacado con monopatines y piedras, mientras lo llenaban de pintadas.
- Al final han terminado incendiándolo, entre aplausos y vítores de la multitud.
- En la ciudad de San Francisco, muchos ciudadanos no quieren a los coches autónomos en las calles.
Lo que nadie quería que ocurriese, ha ocurrido. Las protestas y quejas, han terminado en violencia y destrucción. Un coche autónomo de Waymo, la compañía de Google, ha sido destruido y quemado por una turba violenta, entre aplausos de los viandantes.
La relación entre San Francisco y los coches sin conductor, es compleja. Es una de las ciudades pioneras en permitir este tipo de vehículos, pero una serie de accidentes han provocado el rechazo de la población, pese a que son mucho menos frecuentes y menos graves que los accidentes con conductores humanos.
Las protestas y quejas en redes sociales han subido un nuevo nivel, con la destrucción de un coche autónomo de Waymo mientras circulaba por las calles de la ciudad. Por suerte, no llevaba pasajeros.
El video con la destrucción del coche autónomo de Waymo
Los hechos han ocurrido hace un par de horas, en el barrio de Chinatown, en San Francisco.
Un robotaxi de Waymo circulaba con normalidad, cuando se detuvo en plena calle. No sabemos si por un fallo, o por la propia circulación. Enseguida fue rodeado por un grupo de personas, que comenzaron a realizar pintadas sobre él. Puedes ver la secuencia completa en estos vídeos:
Alguien comenzó a golpear los cristales con los puños, e incluso un monopatín, mientras era vitoreado por la multitud. Esto animó a los violentos, que acabaron destrozándolo y lanzando petardos y fuegos artificiales a su interior, según los testigos. Los cohetes provocaron un incendio en el interior del vehículo, que ardió por completo.
Los coches autónomos llevan meses sufriendo acoso en San Francisco, por una serie de accidentes con heridos, pese a que su tasa de accidentes es cinco veces menor que los coches con conductores humanos:
Ante las protestas, y una serie de fallos continuados, Cruise, la compañía de GM, retiró sus coches autónomos de San Francisco. Pero la empresa de Google, Waymo, ha seguido circulando.
Algunos ciudadanos empezaron a colocar conos de circulación en el capó de los vehículos, para confundirlos y obligarlos a detenerse. Ahora las protestas han subido de nivel, al destruir un robotaxi de Waymo.
Veremos cómo reacciona Google, si mantiene o no sus coches autónomos circulando por la ciudad.
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