El hecho de vivir en un mundo cada vez más globalizado tiene sus ventajas, como el poder viajar con mayor facilidad (y más barato) a cualquier rincón del mundo, tener más acceso a otras culturas y ese tipo de cosas. Sin embargo, también tiene su lado menos amable: las estafas suelen importarse a toda velocidad de unos países a otros. 

Por esta razón, se está advirtiendo de un engaño que se lleva a cabo con bastante frecuencia en Francia, y que, por lo tanto, podría verse más pronto que tarde también en España: el timo del oro. Cuidado si tienes un coche y conduces, porque entonces podrías convertirte en víctima. Te contamos en qué consiste exactamente. 

El timo del oro, la estafa francesa para robarte el coche

En realidad, el timo del oro es bastante parecido a muchas estafas clásicas, de toda la vida, y busca aprovecharse de la codicia de la gente para cegar su sentido común. Es algo que por desgracia suele dar buenos resultados. La principal diferencia es que en este caso tienes que tener vehículo para que funcione, puesto que se da en las carreteras. 

El timo del oro es bastante conocido en Francia y, aunque parezca mentira, suele ser muy efectivo entre la población gala. La forma de actuar de los timadores es sencilla: se sitúan a un lado de la carretera simulando que tienen una avería con el coche y, cuando alguien se acerca a ver qué les sucede, dicen que se han quedado sin gasolina y no tienen dinero en efectivo para llenar el depósito. 

Las excusas que los estafadores dan pueden ser de todo tipo: que son extranjeros y no han realizado el cambio de moneda, que les han robado, que han tenido un problema y su banco les ha bloqueado la cuenta, etcétera. Lo que sea con tal de cumplir su objetivo: que seas tú quien le dé el dinero para la gasolina. ¿Y cómo lo consiguen? Pues con un gancho.

A cambio de dinero para echar gasolina, los timadores te ofrecen joyas (de ahí el nombre del engaño). Argumentando que no tienen demasiado interés para ellas (son ricos, simplemente no pueden acceder a su dinero por cualquier circunstancia puntual), te piden que las aceptes a cambio de unos cuantos billetes para llenar el depósito. El problema es que son falsas. 

Los peligros del timo del oro

Así contado en frío, puede dar la impresión de que hay que ser muy ingenuo para creerse el timo del oro y caer en él. Sin embargo, hay que tener en cuenta varios detalles, como los convincentes y manipuladores que pueden ser los profesionales que llevan a cabo el engaño (también mujeres), o el aspecto creíble de las joyas, por mucho que estas luego no valgan nada. 

Además, en muchas ocasiones los estafadores van acompañados de sus familias en el coche, para dar más lástima y que todo resulte mucho más convincente. Aunque por lo general lo que buscan los timadores es dinero, también se ha dado casos en los que terminan robando el coche de la víctima, así que toda precaución es poca.