Los viajes en avión son cada vez más comunes y accesibles en nuestras vidas, y es que en un mundo globalizado como el nuestro, su uso es muy necesario, no solo para viajar en el mismo continente sino también a otros más lejanos.

En numerosas ocasiones hemos hablado de estos tipos de aviones que buscan la máxima velocidad para ahorrar tiempo. Ya sea a través de la start-up Venus Aerospace y su futuro avión hipersónico capaz de transportar a 12 personas de Los Ángeles a Tokio en 60 minutos, o la asociación de la NASA y Lockheed Martin, con su avión supersónico X-59.

Pues bien, hoy os presentamos al que será el sucesor del Concorde, el Overture. American Airlines, con esta asociación y con la precompra e inversión en 20 aviones, demuestra una gran confianza y posibilita el resurgimiento del mercado supersónico comercial.

El Concorde fue un avión comercial supersónico de transporte de pasajeros. Construido en los años 60 como parte de una empresa conjunta entre el Reino Unido y Francia, fue el primer avión comercial supersónico de transporte de pasajeros. Sólo 14 aviones Concorde entraron en servicio antes de ser retirados por ambos países en 2003.

Este tenía una velocidad máxima de crucero de 2.179 km/h, lo que le permitía reducir el tiempo de vuelo entre Londres y Nueva York a unas tres horas. El gran problema detrás de este fue el coste de desarrollo, que fue tan elevado que nunca pudo recuperarse con las operaciones, y el avión nunca fue rentable económicamente. 

En cuanto a la novedad supersónica que hoy nos ocupa llamada Overture, según informa New Atlas, tiene ya previsto hacer su vuelo inaugural en 2026 y estar completamente operativo para el público en 2029. Podrá transportar hasta 80 pasajeros a velocidades de hasta 2100 km/h, lo que le permitirá volar de Tokio a Seattle en tan sólo cuatro horas y media.

"De cara al futuro, los viajes supersónicos serán una parte importante de nuestra capacidad de entrega a nuestros clientes", dijo Derek Kerr, director financiero de American. "Estamos entusiasmados con la forma en que Boom dará forma al futuro de los viajes, tanto para nuestra compañía como para nuestros clientes".