Algunos modelos de Raspberry Pi 5 se pueden overclockear hasta 3,14 GHz
- La Raspberry Pi 5 ha traspasado la barrera de los 3 GHz gracias al overclock y a un firmware actualizado.
- Un método que aumenta el rendimiento, pero no es compatible con todos los modelos de la placa.
La Raspberry Pi es una monoplaca del tamaño de una tarjeta de crédito, cuyo objetivo es acercar la informática y la programación a una audiencia más amplia, especialmente entre los estudiantes. Este pequeño dispositivo se ha convertido en una maravilla multiusos.
Cabe señalar que este miniordenador se ha convertido en una opción popular para proyectos de bricolaje, educativos y de desarrollo gracias a su bajo coste y versatilidad.
Con su CPU de hasta 2.4 GHz, ofrece un rendimiento sólido para una variedad de aplicaciones. Sin embargo, algunos entusiastas han descubierto que es posible elevar sus capacidades técnicas mediante el overclock.
El overclocking es una práctica común entre los aficionados a la informática que consiste en aumentar la velocidad de funcionamiento de un componente, como el procesador, más allá de sus especificaciones nominales.
Por supuesto, esto se logra ajustando la frecuencia de reloj y el voltaje del componente para aumentar su rendimiento. Sin embargo, hay cosas que necesitas saber antes de hacer overclock a tu Raspberry Pi.
¿Raspberry Pi 5 a 3,14 GHz?
La Raspberry Pi 5 es conocida por su potente CPU de fábrica, que funciona a 2,4 GHz. Sin embargo, gracias al overclock, es posible aumentar significativamente este rendimiento.
Jeff Geerling, un usuario experimentado, descubrió que una de sus placas podía ser overclockeada hasta 3,14 GHz sin problemas al ejecutar una prueba de rendimiento.
Es crucial mencionar que, para estas pruebas, Jeff equipó su Raspberry Pi 5 con un sistema de enfriamiento Argon THRML 60-RC. Además, con una actualización de firmware poco recomendable, procedió a efectuar múltiples tests de estabilidad a diversas velocidades.
Finalmente, determinó que tanto 2,4 GHz como 3,0 GHz eran frecuencias estables que funcionaban perfectamente en la placa, pero al incrementar a 3,10 GHz, la tarjeta aún era capaz de iniciar y ejecutar una prueba de esfuerzo (stress-ng).
No obstante, al intentar escalar hasta los 3,2 GHz, la tarjeta no lograba completar la secuencia de inicio. Después de más pruebas, Jeff concluyó que 3,2 GHz no ofrecía la estabilidad esperada; sin embargo, el dispositivo operaba adecuadamente a 3,14 GHz.
Cabe señalar que solo algunos modelos de Raspberry Pi 5 pueden ser capaces de alcanzar estas velocidades más altas de manera segura y estable, mientras que otros pueden tener limitaciones que impidan un overclock exitoso.
¿Por qué? La capacidad de overclockear esta placa hasta 3,14 GHz puede depender de varios factores, incluida la variabilidad en la producción, el modelo del chip y el control de calidad durante el proceso de fabricación.
Es importante tener en cuenta que llevar a cabo este procedimiento conlleva ciertos riesgos, especialmente en lo que respecta a la temperatura del dispositivo.
Aumentar la velocidad de la CPU puede provocar un aumento significativo en la temperatura, lo que podría dañarlo si no se cuenta con una adecuada refrigeración. Por tanto, se recomienda utilizar soluciones de refrigeración adecuadas si se decide realizar overclock en una Raspberry Pi 5.
Esta práctica puede anular la garantía y podría reducir la vida útil de la monoplaca si no se realiza correctamente. De esta manera, es fundamental llevar a cabo pruebas de estabilidad exhaustiva antes de realizar cualquier modificación en la configuración de la CPU.
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