Generación Z directa al pasado: desconexión digital en el siglo XXI, ¿qué está ocurriendo?
Pese a nacer en mundo rodeado de tecnología, algunos jóvenes están decidiendo alejarse de forma contundente de las redes sociales, smartphones de última gama o incluso de hacer un uso sin control de las aplicaciones o sus datos.
En el siglo XXI, la Generación Z —nacidos entre mediados de la década de los 90 y principios o mediados de la del 2000— , también conocida como centennials o post-millennials, ha crecido en un mundo donde la tecnología ha transformado cada aspecto de su vida diaria.
A diferencia de sus predecesores, los millennials, quienes se adaptaron rápidamente a las redes sociales y la era digital, la Generación Z parece estar adoptando una actitud más reflexiva y consciente respecto a su relación con la tecnología.
Aunque han crecido y se siguen desarrollando rodeados de avances tecnológicos, sorprendentemente, muchos jóvenes de esta generación están adoptando un enfoque más "retro" en su forma de vivir y conectarse con el mundo. La nostalgia, la desconexión digital y el deseo de preservar su privacidad son aspectos clave que definen a esta generación en la era de la hiperconexión.
La nostalgia parece jugar un papel fundamental en esta nueva perspectiva de los jóvenes. Aunque muchos de ellos no vivieron los tiempos analógicos, se sienten atraídos por la estética y la sensación de lo retro, buscando reconectar con una época que consideran más genuina y auténtica.
Esta no solo se refleja en la preferencia por objetos vintage, sino también en el gusto por la música, la moda y los videojuegos de décadas pasadas. Esta tendencia podría interpretarse —en mi opinión— como una forma de contrarrestar la convulsa y siempre agitada vida digital y encontrar un punto de referencia con la realidad.
Asimismo, existe un auge en el interés de estos por la privacidad en línea y al uso de aplicaciones de mensajería cifrada y plataformas que prometen un mayor control sobre sus datos personales. Quieren proteger su intimidad en un mundo donde parece casi imposible. Ahora la duda es, ¿por qué está ocurriendo este fenómeno? ¿Están los más jóvenes realmente saturados?
Más allá de la pantalla: la búsqueda de lo auténtico en un mundo hiperconectado
Para entender mejor este fenómeno —que está ocurriendo poco a poco y no de forma generalizada— y su impacto en la psicología y el comportamiento de la Generación Z, se han recopilado algunas opiniones y declaraciones de un psicólogo.
Explica que la nostalgia y la búsqueda de lo antiguo por parte de la Generación Z pueden estar relacionadas con un deseo de escapar del estrés y la sobrecarga de información que conlleva la era digital.
"La Generación Z está experimentando una especie de fatiga digital debido a la constante exposición a las redes sociales y la tecnología. Desconectarse les da una oportunidad para recuperar el equilibrio y encontrar una sensación de paz", explica en una entrevista para Computer Hoy Joaquín Ferrol, psicólogo general sanitario.
En un mundo dominado por las redes sociales y las expectativas de estar constantemente conectados, muchos jóvenes encuentran consuelo y autenticidad en la simplicidad de tiempos pasados. Además, la nostalgia puede actuar como una especie de refugio emocional, permitiendo a estos reconectar con recuerdos positivos y sensaciones placenteras de su infancia o juventud.
En cuanto a la desconexión digital y la protección de la privacidad, el psicólogo señala que esta actitud puede estar relacionada con una mayor conciencia sobre los riesgos y desafíos de la vida online.
La Generación Z ha crecido viendo cómo la exposición excesiva en las aplicaciones puede afectar la salud mental y la imagen de uno mismo, lo que ha llevado a muchos a ser más cautelosos en cuanto a lo que comparten y con quién lo hacen.
"Valoran la privacidad como una forma de proteger su identidad y autonomía en un mundo en línea donde la exposición constante puede llevar a la pérdida del control sobre su propia narrativa", añade el experto entrevistado.
Sin embargo, también se advierte sobre los posibles efectos negativos de esta tendencia a la desconexión digital. Aunque proteger la privacidad es importante, el aislamiento excesivo puede llevar a la soledad y a una sensación de desconexión social.
Con esto parece esencial encontrar un equilibrio entre la privacidad o apartarse de la actualidad y la conexión con el resto. Expertos sugieren que la clave está en fomentar relaciones tanto en línea como fuera de ella y en utilizar la tecnología de manera consciente y responsable.
En pocas palabras, los psicólogos ven esta actitud como una respuesta reflexiva y consciente a los desafíos y oportunidades que ofrece la era digital y la verdad es que resulta bastante interesante y sobre todo positivo.
"La desconexión digital de vez en cuando es esencial para el bienestar mental de todos. Permite recargar energías, reconectar con el mundo real y establecer relaciones sociales de verdad", finaliza el experto.
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Redactora de Tecnología, especializada en inteligencia artificial y ciberseguridad.
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