Un estudio reciente publicado en JAMA Neurology ha arrojado luz sobre los factores de riesgo asociados con la demencia de inicio temprano (YOD). Este descubrimiento, considerado un hito en la neurociencia, podría abrir nuevas vías para la prevención y el tratamiento de esta condición debilitante.

Dirigido por expertos de la Universidad de Exeter y Maastricht University, este estudio ha identificado 15 factores de riesgo asociados con la demencia temprana. Se destacan elementos como el nivel socioeconómico, el aislamiento social y diversas condiciones de salud como la diabetes y la depresión. 

Este conocimiento es crucial, ya que la demencia no solo afecta a los mayores, sino también a personas en la plenitud de su vida laboral y familiar. Toda prevención es poca.

Analizando a más de 356.000 individuos menores de 65 años en el Reino Unido, los investigadores descubrieron que ciertas prácticas de vida y condiciones de salud juegan un papel importante en el aumento del riesgo de demencia temprana (YOD). 

Por ejemplo, la deficiencia de vitamina D y los altos niveles de proteína C-reactiva, un indicador de inflamación, están directamente relacionados con un mayor riesgo.

Un consumo abusivo de alcohol es perjudicial para el desarrollo de demencia

Uno de los hallazgos más llamativos es la compleja relación entre el consumo de alcohol y la demencia temprana. Mientras el abuso de alcohol es perjudicial, un consumo moderado parece ofrecer cierta protección, posiblemente debido a los estilos de vida más saludables de estos individuos.

El estudio también resalta la importancia de un mayor nivel educativo y una menor fragilidad física, medida por la fuerza de agarre, en la reducción del riesgo de la demencia. Estos hallazgos refuerzan la idea de que mantener la mente y el cuerpo activos es clave en la prevención.

Este estudio no solo desafía la idea de que la genética es el único factor detrás de la demencia temprana, sino que también abre la puerta a intervenciones preventivas basadas en estilos de vida y bienestar mental. A través de la tecnología y la medicina, podríamos estar más cerca de un futuro donde la memoria y bienestar mental perdure más allá de la edad.