El invierno se acerca, y con él llega la temporada de calefacción, algo que, si te lo puedes permitir, resulta esencial para estar cómodos en los días más fríos que todavía están por llegar. 

Sin embargo, con el aumento de los precios y la creciente conciencia ambiental, es esencial encontrar formas de calentar las casas de una forma algo más eficiente y sostenible sin que la factura se dispare. 

Es hora que conozcas algunos consejos clave para ahorrar en calefacción, asegurándote de que el confort y el cuidado del medio ambiente, en la medida de lo posible, vayan de la mano. Desde la importancia del aislamiento hasta el uso de tecnología inteligente y la consideración de energías renovables, es hora de adentrarse en el frío y oscuro, aunque no lo parezca, mundo de la calefacción.

"El 93% de los hogares en los que se ha percibido este incremento considera que el importe medio de su factura ha subido mucho o bastante y, en concreto, son 1 de cada 4 los hogares españoles en los que el gasto medio mensual en calefacción es superior a 100€. Un gasto que, efectivamente, se ha incrementado en comparación con el dato arrojado por el mismo estudio publicado por la compañía hace dos años: en 2021, los hogares que gastaban en calefacción más de 100€ eran tan solo un 19%, frente al 26% actual", se explica en el estudio de Hábitos de consumo de calefacción y climatización de los hogares españoles de Bosch Home Comfort.

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Antes de nada resulta fundamental que comprendas el concepto de eficiencia energética. Esta idea se refiere a la optimización del uso de la energía para lograr los mismos resultados o incluso mejores sin gastar más recursos. 

En el contexto de la calefacción, esto significa que se puede mantener tu casa a una temperatura agradable mientras consumes menos energía, lo que se traduce en facturas más reducidas, que no viene nada mal, y una menor huella ambiental.

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Con todo esto, uno de los aspectos más importantes para ahorrar en calefacción es garantizar que tu casa esté bien aislada. Esto significa que debes evitar fugas y mantener el calor dentro de tu casa. 

El aislamiento adecuado puede incluir el sellado de grietas en ventanas y puertas, la instalación de doble acristalamiento y la mejora del aislamiento en el techo y las paredes. Lógicamente, no es barato, pero, como toda inversión, a largo plazo, acaba siendo rentable. 

Además, presta atención a las corrientes de aire. Sellando cualquier abertura por donde el aire frío pueda entrar, estarás asegurando que tu calefacción no tenga que trabajar un extra para mantener la temperatura que buscas. 

Uno de los casos que están viviendo algunas comunidades de vecinos, es la instalación de termostatos en sus radiadores. El ahorro en este caso es considerable, ya que la calefacción se apagará de forma automática cuando se haya logrado la temperatura que buscas o de forma manual si, por ejemplo, no estás en casa.

"Entre las medidas adoptadas para controlar la factura energética, destacan la reducción de horas de uso y la bajada de temperatura de consigna. Lo más habitual ha sido reducir su uso entre un 25 y un 50%. Asimismo, más del 70% de los hogares afirman haber tardado más de lo habitual en iniciar la temporada de calefacción, encendiendo esta con el invierno más avanzado", añaden desde  Bosch Home Comfort.

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Por supuesto, y ya yendo a la actualidad, la tecnología puede jugar un papel muy clave en la eficiencia energética. La instalación de termostatos inteligentes te permite controlar la temperatura de tu hogar de manera remota a través de una aplicación en tu móvil. 

Puedes ajustar la calefacción según tus necesidades, incluso si no estás en casa. Algunos también aprenden tus preferencias y ajustan automáticamente la temperatura para ahorrar energía.

Por otro lado, el mantenimiento adecuado de tu sistema de calefacción es básico para asegurar su eficiencia. Asegúrate de que tu caldera o sistema de calefacción central estén en buenas condiciones de funcionamiento. Por su puesto, es clave limpiar o reemplazar los filtros de aire regularmente, aunque casi que esto no haría falta ni decirlo.

"Cerca del 45% de los españoles se plantean cambiar su actual calefacción por otra que funcione con energías renovables a raíz de la subida de precios. En concreto, las soluciones de calefacción en las que piensan a la hora de sustituir sus sistemas actuales son la aerotermia y los equipos que funcionan con energía solar", añaden desde Bosch Home Comfort y su estudio.

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Una de las grandes claves: un hábito de consumo responsable

Además de las mejoras en tu casa y las opciones de energía, tus hábitos de consumo juegan un papel muy importante en el ahorro de calefacción. 

Cierra las puertas para evitar que el calor se escape y asegúrate de que las ventanas estén bien cerradas. También puedes utilizar cortinas pesadas para retener el calor en las noches frías y abrirlas durante el día para aprovechar la luz solar natural.

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Lógicamente, y aunque busques el calor, una ventilación adecuada es necesaria para que tu casa no parezca un zulo. Abre las ventanas por poco tiempo y a primera hora de la mañana para ventilar las habitaciones y luego ciérralas para evitar que el calor se escape. "Si en tu fachada da el sol, ventila durante 10 minutos nada más levantarte y deja las persianas subidas, para que entre el sol", explican desde la OCU.

"Si tienes radiadores de agua, no te olvides de purgar el aire para conseguir el mejor rendimiento de la caldera. Además, un buen mantenimiento de la caldera puede ahorrarte hasta un 15% al año", añaden. Además, no obstruyas las salidas de aire caliente con muebles, decoraciones o incluso unas cortinas, ya que esto claramente reduce la eficiencia del sistema de calefacción.

El invierno no tiene por qué ser sinónimo de facturas de calefacción que terminan por ahogarte. No cabe duda de que con la combinación adecuada de medidas y algunos hábitos básicos bastante sencillos, puedes mantener tu casa bien caliente sin sacrificar tu bolsillo.