Agárrate porque esta historia tiene mucho que contar y la magnitud del tesoro escondido bajo el mar seguro que traerá más de una disputa. Hace más de tres siglos, en las aguas caribeñas frente a la costa de lo que hoy es Colombia, se libró una batalla que cambiaría la historia. 

El San José, un galeón de tres mástiles y 64 cañones que comenzó a surcar las aguas en 1698, se enfrentó a los británicos el 8 de junio de 1708. Esta lucha acabó con una explosión que llevó al San José a las profundidades del océano, convirtiéndolo en un naufragio olvidado durante generaciones. Hoy, el "Santo Grial de los naufragios" está a punto de emerger de lo más hondo.

El descubrimiento del San José se convirtió en todo un gran momento histórico en diciembre de 2015, cuando un equipo de buzos de la marina colombiana encontró los restos del galeón a una profundidad de casi 1.000 metros. 

Este hallazgo fue anunciado a bombo y platillo por el entonces presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, quien lo calificó como el más valioso en la historia de los naufragios. Este se encontraba muy bien conservado pese a la profundidad, con un tesoro que incluía lingotes de oro, cerámicas y vajillas chinas, y los cañones del barco que datan del año 1655. 

Lo más interesante, por supuesto, son las arcas del barco con 11 millones de monedas de oro, que constituyen una parte importante de las 200 toneladas de tesoro a bordo —que, según se informa, también incluyen plata y esmeraldas—. En total se habla de unos 20.000 millones de dólares.

Entonces, una vez que el barco salga a flote, ¿quién será el dueño de esos 20.000 millones de dólares?

Teniendo en cuenta su valor, esta maravilla se ha convertido en uno de los tesoros más valiosos jamás descubiertos en un naufragio. Sin embargo, esta riqueza bajo el mar, como no podría ser de otra forma, ha hecho que algún que otro país comience a discutir por su pertenencia: ¿De quién es realmente este tesoro?

Por un lado, se encuentra un grupo de inversores estadounidenses que operan bajo el nombre de Glocca Morra, posteriormente conocidos como Sea Search Armada. Afirman haber firmado un contrato de salvamento en 1979 que les otorgaba el derecho a la mitad del tesoro. 

Según lo que cuentan, encontraron el San José en 1981 a una profundidad de aproximadamente 200 metros y dieron coordenadas a las autoridades colombianas. Sin embargo, Colombia niega esta afirmación, alegando que el naufragio no se encontró donde decían.

España también se posiciona como una posible heredera del Santo Grial de los naufragios

Por otro lado, España, que originalmente era propietaria del barco y de la carga extraída a la fuerza a bordo, también ha intentado reclamar su parte del tesoro. Además, el grupo indígena Qhara Qhara de Bolivia ha hecho acto de presencia, argumentando que sus antepasados se vieron obligados a extraer los metales y gemas que cargaba el San José.

Con todo esto, el gobierno colombiano quiere sacar de forma inmediata al San José de las profundidades, con planes de culminar la operación antes del fin del mandato del presidente Gustavo Petro en 2026. El rescate del galeón, lógicamente, representa una potencial ganancia financiera para Colombia, porque sí, también forma parte de esa lista de posibles dueños.

El naufragio del "Santo Grial" del siglo XVII está listo para ver de nuevo la luz y salir de las profundidades marinas, pero el destino de su tesoro va a dar un quebradero de cabeza a más de uno. ¿Te imaginas que finalmente se reconoce a España como dueño de ese increíble tesoro?