La semana pasada se produjo uno de los mayores terremotos de la tecnología de los últimos tiempos. En apenas 72 horas, el hombre del momento, Sam Altman, CEO de Open AI, fue despedido de la empresa que fundó y vuelto a contratar sin ningún tipo de explicación aparente.

Tal y como rezaba el comunicado, el consejo había "perdido la confianza" depositada en él para dirigir la empresa, pero no dejaban claro las razones. Si bien al principio el motivo parecía ser una brecha de seguridad de la que no había avisado, poco a poco las explicaciones se tornaron hacia una línea más de negocio en la que se presuponía que todo se debía a que los inversores querían hacer de la empresa una compañía más rentable.

Sin embargo, nada de esto se podía comprobar... hasta ahora. Justo un año después de lanzar su producto estrella, ChatGPT, Altman ha concedido una entrevista al medio estadounidense The Verge en la qué prevé para el futuro de la compañía y ha arrojado algo de luz al culebrón en el que se vio envuelto hace apenas unos días. Estas son las cosas que debes saber.

1. "Nuestra estructura tiene un problema"

La estructura a la hora de gestionar de OpenAI es bastante complicada. Está organizada en una serie de empresas sin ánimo de lucro con otra con ánimo de lucro que es la responsable del OpenAI que se utiliza por millones de usuarios, como Dall-E o ChatGPT y que necesita ganar dinero para ofrecer, por ejemplo, altos salarios a sus empleados. Todo controlado por una junta directiva que elige al CEO.

"Diseñar una [nueva] estructura de gobierno realmente buena, especialmente para una tecnología tan impactante […] llevará mucho tiempo".

2. Ni Sam Altman sabe por qué le despidieron

En la entrevista, una de las primeras preguntas es acerca de los motivos por su despido, de los cuales Altman no conoce los motivos o no quiere comentarlos públicamente. "La junta va a hacer una revisión independiente".

Altman se refiere a una nueva junta directiva, ya que saldrán los directivos que votaron a favor de su salida.

3. La junta directiva le pidió, 24 horas después de ser despedido, que volviese

Altman comenta cómo el mismo sábado, solo 24 horas después del anuncio de su despido y ya siendo una de las historias del año, algunos miembros de la junta le llamaron y le preguntaron si estaría dispuesto a hablar sobre su despido.

Su respuesta inicial fue obvia: "Me habéis hecho daño y estoy enfadado, y creo que todo esto apesta", comentó al miembro de la junta directiva. "Tardé unos minutos en espabilarme y superar mi ego para decir que sí quería volver".

4. La seguridad de OpenAI no tuvo nada que ver con su despido 

Entre los rumores que se dieron para esclarecer el motivo por el que se despidió a Altman, se comentó un posible problema de seguridad.

Mira Murati, director de tecnología de OpenAI, fue categórico en la entrevista en la que también participó, declaró que la salida de Altman no tiene nada que ver con la seguridad.

5. El proyecto "Q*" está centrado en la investigación, por ahora no será llevado a sus productos

Otros de los posibles motivos por el que se creía que se despidió a Altman es la relación con un nuevo proyecto en inteligencia artificial, llamado Q*, del que se habría logrado un gran avance en lo que refiere a la inteligencia artificial.

"Sin comentar nada en concreto, proyecto o lo que sea, creemos que el progreso es la investigación". Altman también comenta que el progreso de la IA seguirá siendo rápido y que seguirán trabajando para que sea segura y beneficiosa para la sociedad.