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El mensaje de error de una máquina expendedora que ha aterrorizado a todo un campus

El mensaje de error de una máquina expendedora que ha aterrorizado a todo un campus

Colton Wiens/CTV News

  • Los peligros ocultos a la hora de comprar un simple snack en una máquina expendedora en este campus en Canadá.
  • Los estudiantes de esta universidad descubrieron que la máquina expendedora del campus les espiaba desde hace meses.

Algo tan inocente como echar una moneda en una máquina expendedora para sacar una botella mineral o cualquier snack puede acabar convirtiéndose en un gran peligro, sobre todo con los avances de las nuevas tecnologías.

Esto es lo que ha pasado exactamente a cientos de estudiantes de la Universidad de Waterloo en Canadá, quienes han descubierto que las máquinas expendedoras del campus les estaban espiando.

De sorpresa descubrieron que las máquinas expendedoras del campus tenían una función oculta que invadía su privacidad.

En concreto se habla de las máquinas expendedoras de la marca M&M en las que de la noche a la mañana apareció sobreimpresionado en pantalla una ventana emergente sobre un error, algo que no tendría que ser nada especial si no fuera porque el error hacía referencia a una función de reconocimiento facial que no se conocía.

El mensaje de error de una máquina expendedora que ha aterrorizado a todo un campus

CTV News

Gracias a esta ventana emergente pudieron conocer los estudiantes que esta máquina expendedora aparentemente inofensiva tenía instalada en secreto una aplicación de reconocimiento facial.

"No lo habríamos sabido si no fuera por el error de la solicitud. Aquí no hay ninguna advertencia", dijo a CTV News River Stanley, un estudiante de último año de la Universidad de Waterloo.

Tras eso, muchos estudiantes comenzaron a cubrir la pequeña cámara de las máquinas expendedoras con chicle y notas adhesivas.

Estas máquinas expendedoras son fabricados por la empresa llamada Invenda y que son propiedad de fabricante M&M.

Tras investigar la situación, descubrieron que estas máquinas expendedoras tenían instalado un sensor demográfico. Este sensor no solo realiza un recuento de personas, sino que también hace un perfil demográfico que permite a las máquinas calcular la edad y el género de cualquier persona que se acerque a la cámara.

La empresa responsable Invenda se ha defendido, señalando que estas funciones que realiza son de conformidad con las leyes de privacidad de datos: "El software de detección demográfica integrado en la máquina expendedora inteligente funciona de forma totalmente local", dijo Invenda a Stanley en un correo electrónico. "No se dedica al almacenamiento, comunicación o transmisión de ninguna imagen o información de identificación personal".

La universidad ha pedido que estas máquinas sean retiradas del campus lo antes posible, mientras que ya se ha exigido que se desactive el software de forma inmediata.

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