¿Has experimentado problemas con la velocidad de Internet en casa? ¿O tal vez notas que ciertas áreas tienen una mala cobertura? No te preocupes, existe una solución que puede cambiar por completo tu experiencia de navegación, se trata del modo puento bridge. 

Imagina que tu router WiFi también desempeña el papel de módem, donde este último recibe la señal de tu red desde el proveedor y la convierte en algo que tus dispositivos pueden entender. Luego, el router distribuye esa señal a tus equipos para que puedas navegar, transmitir, jugar y todo lo demás. En resumen, el enrutador hace dos cosas a la vez: convierte la señal y la comparte. 

Qué ventajas tiene el modo puente (bridge) y para qué sirve

Si bien los routers proporcionados por las operadoras pueden satisfacer las necesidades del usuario promedio en algunas ocasiones, está claro que no son la solución perfecta para todos. Aquí es donde entra en juego el modo puente y la opción de adquirir un router neutro. 

Para entender un poco este concepto y como funciona, es importante mencionar que el cable de fibra óptica que se instala en tu hogar se conecta a un dispositivo conocido como ONT o Terminal de Red Óptica. En muchos casos, los enrutadores de tu ISP tienen este ONT integrado, lo que significa que incluso si decides cambiar a otro router en el futuro, este debe permanecer en su lugar. 

La instalación final implica conectar el router neutro al de la operadora, y asegurarte de que este último esté en modo puente. De esta manera, tu router se encargará de las funciones de enrutamiento, conmutación y punto de acceso, mientras que el router de tu operadora actuará simplemente como un módem, permitiendo que la señal fluya a través del ONT. 

Cómo activar el modo puente del router WiFi

1. Asegúrate de estar conectado a la red WiFi del router o mediante un cable Ethernet.
2. Abre un navegador web en tu dispositivo (ordenador, tablet o smartphone) y en la barra de direcciones escribe la dirección IP (192.168.1.1). 
3. Es posible que se te solicite un nombre de usuario y contraseña para acceder a la configuración del router e iniciar sesión. 
4. Una vez dentro de la configuración, busca la opción relacionada con el modo puente. Cabe señalar que esto puede variar según el modelo del router y la marca, pero generalmente se encuentra en la sección de configuración avanzada o en la opción de red.
5. Activa el modo puente y reinicia el router. 

Entre las ventajas de este modo bridge del router radica en su capacidad para ampliar el alcance de tu red WiFi. Si bien esta configuración no se limita a empresas, es especialmente útil en oficinas y hogares grandes con muchas paredes y obstáculos físicos que pueden bloquear la señal. 

Cuando estás cerca del enrutador inalámbrico proporcionado por tu ISP, la señal es fuerte y estable, pero a medida que te alejas, la calidad disminuye llegando a un punto en que la conexión se pierde por completo. 

Así debemos colocar las antenas del router para tener el mejor WiFi en nuestro hogar

El modo puente ofrece una solución efectiva a este desafío, ya que al conectar múltiples routers al módem/router de tu operadora, puedes extender el WiFi y mejorar la recepción en áreas anteriormente problemáticas. 

Es importante recordar que este modo no solo es una opción técnica, sino un derecho respaldado por la Ley General de Telecomunicaciones. Significa que tienes la libertad de elegir qué router utilizar y cómo optimizar tu experiencia de red, por lo que las operadoras están obligadas a brindar esta función en sus routers para permitir conectar tu propio equipo y disfrutar de una mejor conexión.

Por otro lado, si el router de tu ISP no dispone del modo puente, puedes presentar una reclamación ante la autoridad reguladora Usuarios Teleco para iniciar una investigación. Sin duda, esta configuración mejorará el rendimiento de tu Internet en todos los sentidos, lo que te ayudará a tener una experiencia ampliada en todo tu hogar.