El curioso y saludable motivo por el que deberías comer siempre una naranja después de un plato de lentejas
- Las lentejas son una buena fuente de hierro, con 7,5 miligramos por cada 100 gramos, pero solo una pequeña parte pasa al organismo.
- Se recomienda incluir una fruta cítrica en la dieta diaria para aprovechar al máximo sus propiedades.
- Comer esta fruta antes de irte a la cama ayuda a dormir mejor y más rápido, incluso aunque haga mucho calor.
Las lentejas no son el plato preferido de muchos, especialmente de los más pequeños. Sin embargo, son un alimento muy saludable, ya que son una buena fuente de proteínas, fibra, pero sobre todo de hierro.
Según la Fundación Española de Nutrición (FEN), las lentejas aportan poco más de 7 miligramos de hierro por cada 100 gramos. A simple vista, podría parecer que esto no se compara con la cantidad de hierro presente en un filete de ternera, que es de solo 2.1 miligramos.
Pero la verdad, es que el hierro de esta semilla es diferente al que se encuentra en productos de origen animal, que se le conoce como hierro hemo, y se absorbe más fácilmente que el hierro vegetal.
En cambio, el hierro que proviene de fuentes vegetales es llamado hierro no hemo, y la diferencia principal radica en la forma en que el cuerpo los absorbe. Los expertos afirman que el organismo retiene entre el 10% y el 25% del hierro hemo, mientras que el no hemo entre un 2% y un 5%.
La naranja, el secreto para absorber mejor el hierro de las lentejas
Para maximizar la absorción del hierro no hemo que se encuentra en las lentejas, es crucial añadir una naranja a tu comida, algo tan básico puede tener muchos beneficios para tu salud.
Esta fruta, al igual que otros alimentos ricos en vitamina C como las mandarinas, el kiwi o las fresas, es una excelente fuente de nutriente. La naranja contribuye a que el pH del estómago se vuelva más ácido, lo que, sorprendentemente, es beneficioso para la absorción del hierro no hemo.
Cabe señalar que un ambiente ácido mantiene el hierro de las lentejas en su forma reducida, lo que facilita que el organismo la absorba. Asimismo, evita que los fitatos y taninos bloqueen su entrada al cuerpo.
Por lo tanto, si quieres aprovechar al máximo los beneficios nutricionales de las lentejas, es fundamental que no olvides acompañarlas de una fruta cítrica, como la naranja. De esta manera, ayudarás a tu cuerpo a absorber mejor el hierro no hemo y a mantenerte sano y lleno de energía.
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Descubre más sobre Juan Manuel Delgado, autor/a de este artículo.
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