La popular serie Juego de Tronos ha sufrido una recriminación del organismo de censura británico, por las palabrotas que se dicen en uno de los capítulos. Pero no hace mención a la violencia o las escenas de sexo.

El incidente ocurrió el pasado 19 de agosto, según cuenta Deadline, cuando la plataforma SKY emitió un capítulo de Juego de Tronos a las 7:35 de la mañana, sin la obligatoria protección mediante contraseña. El capítulo, calificado para mayores de 18 años, pudo ser visto libremente por todo el mundo, incluyendo menores y niños.

Según el regulador de contenido OfCom, durante los 40 minutos que permaneció desbloqueado los personajes soltaron "graves palabrotas". Personalmente, si un niño se pusiera a ver Juego de Tronos me preocuparía más las brutales escenas de violencia o de sexo, especialmente en las primeras temporadas, que básicamente eran porno blando...

La fuerte censura del Reino Unido

Los británicos tienen uno de los sistemas de censura más controlados del mundo. Allí todo el contenido para adultos está bloqueado por defecto. Si quieres desbloquearlo tienes que llamar por teléfono, identificarte como mayor de 18 años, y desbloquearlo para tu domicilio.

También está prohibido emitir contenido para mayores de 18 años antes de las 9 de la noche, salvo que esté protegido por contraseña. Es lo que debería haber pasado con el capítulo de Juego de Tronos emitido antes de las 9 de la noche, pero un "fallo técnico", según ha confesado SKY, hizo que dicho capítulo se emitiese sin contraseña, y cualquiera podía verlo, incluyendo menores.

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OfCom ha recriminado públicamente a SKY su violación de la ley, pero no ha comunidado la sanción que recibirá. La plataforma televisiva ha dicho en un comunicado que "aceptamos plenamente que los contenidos fuertes no deben emitirse antes de la franja horaria sin la necesaria protección PIN obligatoria, pedimos sinceras disculpas a los clientes que vieron estos contenidos".

"Nunca ha sido nuestra intención ofender o molestar a nuestros espectadores", añadió el gigante de la televisión de pago.

La censura británica ha vuelto a actuar contra Juego de Tronos, pero no es la única serie que ha sufrido un problema similar. Este tipo de fallos "técnicos" se dan de vez en cuando en el Reino Unido, con series que se emiten fuera de horario de adultos, o sin protección por contraseña.