Este es el elemento más sucio que puedes encontrar en una habitación de hotel, y seguro que lo has tocado muchas veces

Cuando salimos de vacaciones, no solo hay que comprar el pertinente billete de tren o de avión o llenar el depósito de gasolina, sino también encontrar un buen apartamento o una habitación de hotel.

Alojarnos en un hotel puede tener multitud de ventajas, como mucha tranquilidad, una enorme cama y aire acondicionado o calefacción, pero tampoco sabes los clientes que han estado ahí antes que tú.

Ahora un experto ha señalado al DailyStar el elemento más sucio que existe en un hotel, y lamentablemente lo has tocado en muchas ocasiones.

En concreto Anton Radchenko, experto en viajes, afirma que el lugar más sucio de una habitación de hotel es el mando a distancia de la televisión.

“Al llegar del aeropuerto, las habitaciones de hotel pueden parecer limpias, pero hay varios artículos y áreas que pueden considerarse sucias y albergar bacterias y gérmenes dañinos. El control remoto del televisor es uno de los que hay que tener en cuenta", dijo Anton.

Añade que “diferentes invitados lo tocan con frecuencia y rara vez se desinfecta; puede intentar desinfectarlo usted mismo o colocar una bolsa de plástico transparente sobre él para evitar el contacto directo”.

“Otro elemento que generalmente no se limpia entre invitados es el teléfono, y esto podría funcionar con una buena limpieza antes de tocarlo. También puedes intentar usar la función de altavoz”.

Es por ello, que recomienda limpiarlo con alguna toallita desinfectante, antes de utilizarlo, para evitar gérmenes y bacterias.

Cuidado con los vasos de vidrio

Por otra parte, la azafata Kat Kamalani, también recomienda que jamás bebamos de los vasos de vidrio que podemos encontrar en algunos hoteles.

Esto se debe a que es probable que los inquilinos anteriores lo hayan utilizado incluso antes de marcharse y que el limpiador directamente ni los haya limpiado.

En su lugar, recomiendan utilizar tus propios vasos desechables o bien utilizar los vasos desechables que algunos hoteles dejan en las habitaciones, siempre y cuando estén dentro de su plástico sin abrir.