Comer 12 uvas con las últimas 12 campanadas del año como forma de despedirse de este, es la tradición estrella de España. Como símbolo de buena suerte, se aprovecha este momento para darle un protagonismo particular a esta fruta.

Aunque muchos creen que la tradición de comer las 12 uvas a medianoche en Nochevieja se originó en 1909 debido a una cosecha abundante de uvas en las regiones de Almería, Murcia y Alicante, parece que esto podría no ser del todo correcto.

Es cierto que los viticultores de estas regiones tuvieron un excedente de uva ese año y contribuyeron a popularizar la tradición de tomarlas, pero hay informes que remontan la tradición a finales del siglo XIX.

En aquella época, las familias acomodadas solían comer uvas y beber champán para celebrar la Nochevieja. En un esfuerzo por ridiculizar esta tradición solo de ricos, un grupo de madrileños de clase media y baja se reunió en la Puerta del Sol para comer sus uvas y beber su champán; esto es lo que dio lugar a las celebraciones que ahora presenciamos cada año.

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Ahora bien, muchos, sea la circunstancia que sea, deciden no comer uvas, tentando un poco a la mala suerte, aunque eso va con cada uno, pero en su lugar, usan otras 12 piezas de cualquier alimento para intentar simular este momento. Os dejamos con algunas alternativas diferentes para celebrar la llegada del Año Nuevo 2022 si lo tuyo no son las uvas.

Alternativas originales a las 12 uvas de fin de año

12 uvas pasas

Esto, pese a que es una alternativa si no comes 12 uvas, destacar que es aparte una tradición. Los vecinos del pueblo malagueño de El Borge (Málaga) han cambiado las tradicionales uvas por el producto más autóctono de la región: la pasa. 

Aunque se puede elegir entre los dos, en El Borge, la pasa ofrece una forma alternativa de entrar en el Año Nuevo con una fruta que se ha convertido en símbolo de la identidad local y es muy conocida en toda Andalucía.

12 Conguitos o Lacasitos

Esta es quizá la opción más socorrida para los que no quieren 12 uvas. Y es que, tanto unos como otros son esenciales en muchas casas españolas en sustitución y tienen la ventaja de que caben doce en la boca sin muchos problemas, pero la dificultad está en que hay que masticarlos bien antes de tragar, y no es tan sencillo. Pero bueno, eso podemos dejarlo para cuando acaben las campanadas.

Desde luego, 12 Lacasitos o Conguitos serán mucho más fáciles de tomar con las campanadas que 12 uvas, con o sin semillas.

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12 gominolas

Las gominolas en todas sus variantes, colores y formas, desde fresas a ositos, también son una buena opción fácil de comer y a prueba de atragantamientos para sustituir a las uvas. Se comen fácil y el hecho de que el tipo de gominola que os enseñamos casi que se desahoga en la boca, puede ser una gran opción para los más pequeños de la casa.

Además, como ya sabrás, las preuvas que se realizan en muchas ciudades se hacen con este tipo de chuches para evitar la "mala suerte" de comer uvas antes de tiempo.

12 aceitunas

Aquí os presentamos otra opción muy favorable dada la multitud de variedades de aceitunas que tenemos en España. De nuevo, evita que tengan hueso y te será quizá de las opciones más simples de comer en sustitución de las uvas.

Aparte puedes darte un caprichito y dejarte algunas para la celebración que viene después.

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12 cacahuetes o pistachos (pelados)

Por favor, no te pongas a pelarlos 5 minutos antes o te pillará el toro. Como no estén pelados cuando comiencen las campanadas, mejor olvidarse, porque no suele ser tan fácil quitarles la cáscara como parece, y siempre hay alguno que se complica.

Aparte de todo esto, es una gran solución si odias las uvas y amas estos tipos de frutos secos. Además, como siempre recomiendan los médicos, son muy saludables por sus grasas buenas y comer tan solo 12 parece una cantidad más que recomendada. Eso sí, no termines con la bolsa cuando acaben y decidas servirte una copa.

12 gajos de mandarina

Quizá esta no sea una de las mejores opciones ya que hablamos de gajos de mandarina, que pese a ser algo más pequeños que el de las naranjas, puede llegar a pasarnos factura dada la rapidez de las campanadas.

Sin embargo, aconsejamos que cojas un gajo y lo partas por la mitad, así podrás comértelas sin problemas. Desde luego, es una forma muy saludable (aparte de las uvas) de comenzar el Año Nuevo sin encima te has propuesto comer algo más de fruta. Importante resaltar que deberán estar peladas y listas para comer con mucha antelación e identificar si llevan semilla para no atragantarnos.