Las tablets, al igual que pasa con los smartphones, son cada día más potentes y ofrecen mayores capacidades para realizar todo tipo de tareas, lo cual es una gran noticia para todos los usuarios.

El problema viene cuando somos nosotros mismos los que estamos limitando la vida de estos dispositivos con nuestras propias acciones, en muchos casos sin saberlo.

Las tablets están diseñadas para durar, tampoco eternamente, no vamos a pecar de ingenuos, pero sí que es cierto que muchas veces la culpabilidad en el poco tiempo que dure un aparato de este tipo suele recaer más en la persona que lo usa, que en los componentes de fabricación del dispositivo.

Por eso vamos a repasar una serie de errores que se comenten con una tablet, los cuales son los culpables de que funcione durante menos tiempo del que nos gustaría.

Índice de contenidos:

• No usar funda
• El cargador y los cables
• Dejar la tablet enchufada
• Trabajar con la tablet enchufada
• El calor
• Resistencia al agua
• Aplicaciones maliciosas
• Poco espacio de almacenamiento
• No instalar actualizaciones

No usar funda

Las tabletas de gama alta y media ofrecen una cierta resistencia a las caídas, pero todo depende de muchos factores como puede ser la altura a la que estaba el dispositivo, la posición, en que parte de esta fue el impacto y contra que material ha chocado.

Por eso es tan sumamente importante tener una funda de calidad que amortigüe los golpes, porque no solo debe proteger la pantalla, sino también internamente a la tablet.

El cargador y los cables

Algo en lo que mucha gente escatima es en los cables que utiliza para la tablet. Es decir, si necesita tener más de un cargador, muchos tienden a comprarse el que encuentren más batato.

Esto es un total error, porque que va a afectar a la batería, puesto que muchos de los cargadores y claves baratos no tienen la suficiente calidad como para cargar de buena manera, pudiendo dañarla y así acortando progresivamente su vida útil de la tablet.

Dejar la tablet enchufada

Evidentemente, si nos estamos quedando sin carga, lo normal es que poner la tablet contactada a la red eléctrica.

Pero el error que comenten muchos usuarios es dejarla durante horas y horas en la red. Esto es algo que, si pasa un día, no afectará en nada al dispositivo, pero si es una práctica habitual, puede ser sumamente perjudicial no solo para la batería.

Trabajar con la tablet enchufada

Si podemos evitar que la tablet esté en la red electica mientras la estamos utilizando mucho mejor, puesto que es una situación en la que sufre la batería, se sobrecalienta en muchos casos y hace que la autonomía se resiente.

Si solo lo hacemos una vez o de manera muy esporádica, no debería afectar, pero si esto ocurre a menudo hay que evitarlo todo lo posible, porque, como te hemos dicho la autonomía será menor, pero también, ciertos componentes internos se van a ver afectados por la subida de temperatura.

El calor

Partamos de la base de que una tablet se puede utilizar si tenemos altas o bajas temperaturas, pero lo que no podemos pretender (salvo que hablemos de un dispositivo rugerizado, que viene preparado para ello) que aguanten temperaturas extremas.

Dejar la tablet al sol en pleno verano o la intemperie con temperaturas bajo cero, va a dañar la vida útil del dispositivo en prácticamente todos los componentes de su hardware.

Resistencia al agua

Aunque pueda parecer extraño, todavía existe usuarios que confunden un dispositivo resistente al agua con otro a prueba de agua, dos conceptos diferentes.

Si hablamos de resistencia al agua nos referimos a que aguanta salpicaduras, mientras que, si es a prueba de agua, entonces, incluso que se podría hasta sumergir dependiendo del grado de aguante.

De todas formas, la mejor manera es conocer que significa cada certificado con respecto al agua. Estos son:

• IPx0: Sin protección.
• IPx1: Protección contra gotas de agua.
• IPx2: Protección contra el goteo de agua con una inclinación de 15 grados.
• IPx3: Protección contra pulverización.
• IPx4: protección contra salpicaduras.
• IPx5: protección contra los chorros de agua.
• IPx6: protección contra los aguaceros.
• IPx7: protección contra la inmersión durante un tiempo determinado.
• IPx8: protección contra permanencia bajo el agua.

Aplicaciones maliciosas

Mucha gente cree que no se puede tener malware en Android y iOS. Desafortunadamente, esto es un mito.

Posiblemente no esté tan extendido como en Windows, pero en las tablets pueden llegar a operar este tipo de app.

Las aplicaciones maliciosas están diseñadas principalmente para generar ingresos publicitarios fraudulentos, pero algunas también están hechas para robar información personal. 

Lo primero que debemos tener claro para evitar esta situación es que siempre hay que instalar aplicaciones de fuentes oficiales. 

Poco espacio de almacenamiento

Cuando tenemos muchas apps, muchas fotos, muchos vídeos o bastantes documentos, podemos llegar a tener el almacenamiento interno prácticamente lleno, algo que ralentiza la tablet.

Android o iOS, como cualquier sistema operativo, necesitan un mínimo de espacio para poder funcionar de manera correcta, lo que no se va a poder cumplir si casi no tenemos espacio en nuestra tablet.

No instalar actualizaciones

Esto es otro de los fallos que se suelen cometer alguna vez. Puede que no haya sido adrede, es decir, en un momento dado la tablet se puso a actualizar apps y justo en ese instante necesitábamos todo su rendimiento, por lo que apagamos las actualizaciones automáticas, olvidándonos de ello.

Eso significa que puede que haya pasado mucho tiempo sin actualizar, lo que provoca que las aplicaciones estén obsoletas, haciendo que la tablet no funcione todo lo correctamente que pudiera, afectando al rendimiento e incluso a la propia batería.

Todo lo que te hemos contado hoy puede hacer que tu tablet dure menos tiempo y, por eso, es importante que intentes no caer en los errores que acabas de leer. Tu dispositivo, y tú mismo, te lo va a agradecer.