¿Merece la pena comprar un Smart TV 8K ahora mismo o con 4K es suficiente?

- La elección entre un Smart TV 8K y un 4K depende de varios factores, y el presupuesto es uno de ellos.
- El 8K es la siguiente evolución en calidad de imagen con 33 millones de píxeles, cuatro veces más que una pantalla 4K.
- Cosas sorprendentes que puedes hacer con tu Smart TV y que ignorabas completamente.
Hoy en día, los televisores han recorrido un largo camino, desde la era de la televisión estándar y los modelos HD con resolución de 720p. Incluso los populares modelos Full HD (1080p) se han convertido en una opción básica en el mercado.
Sin embargo, en la actualidad los Smart TV han evolucionado drásticamente y la mayoría de las personas han adoptado ya un modelo con resolución 4K, lo que ofrece una calidad de imagen impresionante, así como una experiencia de visualización completa.
Aunque los televisores vienen en una amplia variedad de formas y tamaños, dos de los tipos de pantalla más comunes que encontrarás en el mercado actual son los modelos 4K y los emergentes 8K.
Cabe mencionar que el 4K se ha convertido en el estándar de facto para la mayoría de los consumidores, mientras que el 8K se perfila como la próxima generación que probablemente estará en los hogares con modelos de Smart TV más avanzados en cuanto a diseño y funciones.
Televisores 4K

La resolución 4K, también conocida como Ultra Alta Definición (UHD), es una tecnología de pantalla que ofrece una calidad de imagen excepcional, cuya resolución es de 3840 x 2160 píxeles, lo que equivale a aproximadamente 8.3 millones de píxeles en total.
Esta tecnología se ha vuelto ampliamente accesible en la última década, y los televisores están disponibles en una amplia gama de tamaños y precios.
Puedes encontrar modelos de 55 pulgadas por un rango de precios que va desde 299 a 2.000 euros, lo que los hace asequibles para una gran variedad de consumidores.
En cuanto a la disponibilidad de contenido, el 4K es bastante usual, aunque no todos los programas en la tele tradicional y películas se graban en esta resolución.
La mayoría del contenido todavía se produce en 1080p o 2K, pero se hace uso del escalado ascendente, que mejora la calidad de imagen.
Sin embargo, es importante destacar que el verdadero potencial del 4K se obtiene cuando el contenido se graba originalmente en esta resolución, y los servicios de streaming ofrecen esta experiencia.
Televisores 8K

El 8K es la siguiente evolución en la calidad de imagen. Una pantalla de estas tiene un total de 33 millones de píxeles, cuatro veces más que una pantalla 4K, lo que ofrece una resolución significativamente mejorada. No obstante, esta tecnología es más reciente y aún no es accesible para todos.
Cabe mencionar que el primer televisor 8K se presentó al público en 2013. No obstante, en aquel tiempo, los precios eran muy elevados, y un modelo de 85 pulgadas podía costar más de 130.000 euros, lo que hacía inalcanzable para la mayoría de los consumidores.
Actualmente, existen modelos de menor tamaño, pero siguen siendo bastante caros, y es difícil encontrar uno por debajo de los 1.500 euros. Esto se debe a que se requiere una pantalla de gran dimensión para alojar los miles de píxeles que conforman la resolución 8K.
En lo que respecta al contenido, esta resolución todavía tiene poca oferta, por no decir nula. Todo se basa en el escalado, es decir, en tomar vídeo de menor resolución y mejorarlo a una resolución superior. Aunque esta función puede ofrecer calidad de imagen cercana al 8K, no se aprovecha al máximo.
Televisores 4K vs. 8K, ¿cuál es la mejor opción ahora mismo?

¿Qué televisor te conviene más, un 4K o un 8K? La respuesta depende de varios aspectos. Si no te importa el precio y quieres disfrutar de la máxima calidad de imagen, quizás te interese un televisor 8K, pero debes considerar que debes gastar por encima de los 1.500 euros para un modelo de una marca no reconocida.
Estas pantallas tienen una resolución muy superior y un sonido envolvente que te hará sentir como en el cine. Es el futuro, pero por el momento no es necesario hacer este gasto, ya que no hay contenido suficiente para aprovechar todas sus capacidades, tanto técnicas como de funciones.
No obstante, si tienes esos mismos 1.500 euros en tu cartera, te puedes hacer de un Smart TV 4K de gama alta, donde la experiencia será mucho más completa, con contenido adaptado a dicha tecnología. Podrás disfrutar películas, series y videojuegos a la máxima calidad disponible.
Lo mejor de estos modelos, es que hay muchas marcas y tamaños a elegir en el mercado, según tus preferencias y presupuesto. Otro punto a tener en cuenta es el consumo energético, así como el espacio en tu hogar.
Los Smart TV 8K gastan mucha más electricidad y ocupan más espacio por su gran tamaño, lo que puede ser una situación negativa si vives en un departamento o habitación donde no es posible poner una pantalla de más de 75 pulgadas.
En este sentido, el 4K es la mejor opción, ya que hay modelos que parten desde las 40 pulgadas y se acoplan perfectamente en cualquier espacio. Al final, la decisión es tuya, pero por el momento, un televisor con resolución 8K parece no ser la mejor opción.
Otros artículos interesantes:
- Configuraciones de tu Smart TV engañosas que están empeorando la calidad de imagen sin que lo sepas
- Señales que indican que tu Smart TV está a punto de estropearse
- ¡Gran oferta por el Black Friday! Por la compra de un LG Gram te llevas un monitor Plus View gratis
Descubre más sobre Juan Manuel Delgado, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Computerhoy.