Los grandes proyectos necesitan financiación, aunque no siempre encuentran hilos conductores para unir la innovación con el capital. 

Con este objetivo en mente, Madrid acogió el evento Science for Industry (S4i), que reunió a varios de los proyectos más disruptivos en deep science con fondos de inversión, como BeAble Capital.

Así, La Nave de Madrid se convirtió durante varios días en el centro neurálgico de innovación en ciencia aplicada al sector tecnológico de la capital, donde existen 350 startups de este tipo, según un informe reciente de BBVA Research y BeAble Capital.

Uno de estos proyectos es el que llevan a cabo un equipo de profesionales técnicos de laboratorio de la Universidad de las Islas Baleares, con un dron que podría ayudar a los operarios de actividades en el mar.

Crean una tecnología para drones capaz de hacerlos mejores que los seres humanos

"El objetivo es dotar a este tipo de unidades, que son aviones que pueden despegar y aterrizar en vertical para después volar, de la capacidad para que puedan despegar, aterrizar y operar desde un barco en movimiento", destaca Raúl Sánchez, uno de los responsables.

Ahora, quieren poner en marcha las pruebas de vuelo, ya que solo se han probado las ideas de concepto. De momento, con un presupuesto total de 15.000 euros, la mitad de lo que esperaban, según confiesan a Computer Hoy.

La importancia de los drones de despegue y aterrizaje vertical

A un lado, una máquina capaz de filtrar los microplásticos presentes en el agua; al otro, una caja simple que puede desalinizar el agua, y cerca, casi desapercibido, aparece un avión que, por su aspecto, es de lo más normal.

Sin embargo, es uno de los proyectos más interesantes por todo lo que implica.

Este dron, un modelo de los conocidos como VTOL o drones de despegue vertical, cuenta con uno de los sistemas más codiciados del mundo, ya que podría desplegarse en plataformas como barcos en movimiento.

Además, según explica Sánchez, es un sistema totalmente abierto para que no existan problemas de compatibilidad en el futuro, ya que se espera comercializarlo en un par de años, cuando se hayan realizado todas las comprobaciones necesarias.

"Lo que hemos hecho ha sido diseñar los brazos para el despegue vertical, hemos reforzado las alas con fibras de carbono, resina y fibra de vidrio, y tenemos un equipo muy equilibrado en todas las necesidades que tenemos", agrega.

En total, el peso de este dron es de 5 kilogramos, un valor que irán reduciendo paulatinamente con cada prueba. La primera, un ensayo de entorno para aterrizar en un punto móvil, será en marzo o abril.

Entre sus aplicaciones, cabe destacar el rescate de personas en alta mar, las labores medioambientales e incluso operaciones en tierra en el futuro con IA.

La llegada de la IA

A partir de ahí, lo importante será dotar de autonomía a este avión, para que sea capaz de alcanzar 100 kilómetros. Y, como guinda del pastel, se agregarían cámaras apoyadas con inteligencia artificial.

"Lo que necesitaríamos serían muchas imágenes para entrenar el sistema", destaca Sánchez, quien asegura que ya tienen contactos en la propia universidad que son profesionales en la materia.

Precisamente, la IA es una de las inversiones más fuertes del momento, según el informe mencionado al principio: mientras que la inversión global está en mínimos, la IA está marcando máximos históricos en rondas pequeñas.

Por el contrario, las megarrondas de más de 100 millones de euros se han desplomado, aunque la financiación en deep tech resiste, con la Comunidad de Madrid con el 40% de inversión a nivel nacional.

En este sentido, Félix Zamora Abanades, vicerrector de transferencia, innovación y cultura de la Universidad Autónoma de Madrid, una de las entidades organizadoras de S4i, considera que España es una potencia científica, aunque hace falta otro empujón.

"En lo que fallamos es en lograr que la ciencia se transfiera y genere algo que no tenemos en España, una industria de base tecnológica. Está muy bien el turismo, pero también necesitamos hacer buena ciencia, porque si nos falla el turismo, hemos de tener algo más", concluye.