Hay una compañía que está desarrollando una tecnología de baterías sostenibles de larga duración, basándose en la ingeniería y la química que la NASA ha utilizado durante más de 40 años para alimentar la Estación Espacial Internacional o el telescopio espacial Hubble.

Hablamos de la empresa EnerVenue, que piensa que su tecnología puede reemplazar las baterías tradicionales: "Nuestra tecnología es mucho más segura que la de iones de litio", dijo el CEO de EnerVenue, Jorg Heinemann a IE.

El profesor de la Universidad de Stanford, Yi Cui, descubrió cómo adaptar la tecnología de baterías del níquel hidrógeno de larga duración de la NASA para un uso viable en la Tierra y todo mediante el uso de materiales que redujeron de forma considerable los costes.

Esta tecnología es adecuada para el espacio porque puede soportar condiciones adversas como temperaturas, además, son batería, seguras, duran mucho tiempo y totalmente reciclables.

Además han creado un método para que estas baterías cuenten con un costo reducido y puedan satisfacer la gran demanda de todo tipo de empresas.

Esta nuea tecnología podría ayudar con el despliegue de energía renovable intermitente

Consideran que esta nueva tecnología podría ayudar con el despliegue de energía renovable intermitente, incluida la solar y la eólica: “El almacenamiento juega un papel clave para garantizar que el exceso de generación se capture y luego se use cuando sea necesario, lo que da como resultado una combinación energética menos intensiva en carbono y un suministro de energía más estable”, dijo Heinemann.

“Nuestra tecnología es mucho más segura que la de iones de litio dado que brinda una flexibilidad mucho mayor en términos de la frecuencia y el tiempo de descarga, y dura más de tres veces mientras conserva casi todo su estado original de capacidad”.

“Con tanta atención en los posibles peligros de incendio que plantean las baterías de iones de litio, creemos que existe un mercado importante para una batería doméstica que sea segura contra incendios, cuya vida útil supere los 30 años y que, de hecho, pueda integrarse en partes del hogar que de otro modo no se utilizarían”.