En un futuro, si es que queda alguien en el planeta Tierra, los relojes dejarán de tener 24 horas para cambiar absolutamente todos a 25 horas, y esto puede ser un problema bastante importante para todos esos dispositivos inteligentes.

Y es que la Tierra avanza irremediablemente hacia un día de 25 horas mientras cambia su rotación, y así lo han desvelado científicos de la Universidad Técnica de Munich quienes han descubierto que un día en la Tierra podría llegar a durar una hora más.

Anque no lo creas, la rotación de la Tierra no sigue un ciclo preciso de 24 horas, sino que unos días duran más y otros duran menos, pero para que todo sea mucho más entendible, se han fijado las 24 horas como duración de un día.

Estas inconsistencias se atribuyen a la composición heterogénea de nuestro planeta que cuenta con una mezcla de varios sólidos y líquidos, y cada uno de los cuales influye en la velocidad de rotación del planeta.

Así que el avance de estos investigadores se ha centrado en mejorar un láser anular que es capaz de medir la rotación de la Tierra con gran precisión.

Este láser, que está ubicado dentro del Observatorio Geodésico de Wettzell, yace dentro de una cámara presurizada enterrada bajo tierra.

Este dispositivo utiliza un sistema de selección de espejos para detectar con suma precisión variaciones en la velocidad de rotación de la Tierra, y esa diferencia se indica por las frecuencias fluctuantes entre dos rayos láser.

Y durante estos últimos años, los geodesistas han desarrollado un modelo teórico de oscilaciones láser para explicar todos estos efectos.

Al incorporar un algoritmo correctivo, ahora pueden eliminar dichas discrepancias en las mediciones.

Con esto pueden proyectar que dentro de 200 millones de años, un día contará con 25 horas y no debería extrañarte porque esto ya ha sucedido antes.

De hecho, hace 1400 millones de años un día duraba 18 horas y 41 minutos, y durante la era de los dinosaurios, un día tenía 23 horas.