Flipper Zero es una herramienta potente con una pantalla LCD de 1.4 pulgadas, panel direccional de cinco botones, y una antena de 433 MHz con un alcance de hasta 100 metros.  

Su batería de 2000 mAh le otorga hasta 30 días de autonomía. Este pequeño dispositivo se ha ganado su apodo de Tamagotchi para hackers gracias a su parecido al clásico juguete de los años 90 y a su capacidad para enseñar conceptos básicos de seguridad informática de una manera divertida y sencilla. 

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Pero este equipo va más allá de la etiqueta de simple juguete al ofrecer funciones avanzadas. Con él puedes copiar, leer y emular tarjetas RFID y NFC con total facilidad.  

Además, actúa como un mando a distancia, ya que emula claves digitales a través de señales infrarrojas. Este dispositivo compacto es, sin duda, la entrada al emocionante mundo del hacking ético para principiantes.  

Usos del Flipper Zero 

El tamagotchi para hackers no es un simple gadget, entre sus usos es capaz de convertirse en un transceptor de radio, por lo que puede abrir puertas de garaje, controlar sensores IoT y llaves digitales para los coches.  

De igual manera, puede enviar señales infrarrojas, funcionando como un mando a distancia universal con una creciente biblioteca de códigos. Es decir, puede controlar otros televisores con solo apuntar a la pantalla, por lo que puede reemplazar al mando original del dispositivo.  

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Entre los usos que se le puede dar al Flipper Zero, está la capacidad de leer, guardar y reproducir valores RFID y NFC, incluso puede clonar tarjetas NFC. Esto significa que puede fungir como una tarjeta de acceso, como las que se usan para entrar a las habitaciones de los hoteles.  

Asimismo, este pequeño gadget puede interactuar con sistemas de seguridad, desde cajas fuertes hasta cerraduras electrónicas, abriendo oportunidades para la exploración y aprendizaje en ciberseguridad.  

Por más extraño que parezca, también permite piratear juguetes sexuales, por lo que esta pieza tecnológica no deja de sorprender, no parece tener límite, y plantea cada vez más reflexiones sobre su la seguridad y su uso. 

Peligros de usar el tamagotchi para hackers 

Es crucial recordar que, aunque Flipper Zero es una herramienta educativa, su mal uso puede tener consecuencias graves. Acciones como el acceso no autorizado a dispositivos o la violación de la privacidad pueden llevar a acciones legales. 

Además, el manejo inadecuado puede causar daños en sistemas, así como en dispositivos conectados, y riesgos personales para el usuario, especialmente en entornos peligrosos.  

Por ejemplo, si utilizas el Flipper Zero para leer las etiquetas RFID de otras personas, podrías obtener información personal sobre ellas. También podrías utilizarlo para interferir en el funcionamiento de sistemas electrónicos, lo que podría causar daños o pérdidas económicas. 

Al final, estarías cometiendo un delito grave, y podrías tener consecuencias legales, en casos extremos podrías ir preso por violar la privacidad de las personas, por lo que debes tener cuidado con su uso. 

Flipper Zero llega a los colegios y apunta a ser todo un peligro 

Se ha confirmado que este pequeño gadget ha llegado a los colegios y ha comenzado a generar inquietud en los profesores.  

Su capacidad para interactuar con diversas tecnologías, desde señales RFID y NFC hasta sistemas de comunicación inalámbrica, plantea un riesgo potencial en el entorno escolar.  

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Un ejemplo alarmante fue el caso de un estudiante que utilizó Flipper Zero para apagar móviles en un aula. 

Aunque la administración escolar actuó rápidamente y sancionó al estudiante, la situación resalta los desafíos éticos y legales asociados a la presencia de este dispositivo en entornos educativos.  

¿Juguete o un dispositivo peligroso para los niños y adolescentes? 

Flipper Zero puede ser una herramienta valiosa para enseñar a los niños y adolescentes sobre tecnología y ciberseguridad. Su capacidad para interactuar con señales electrónicas, como eludir la seguridad de algunas cajas fuertes, ofrece oportunidades de aprendizaje práctico.  

Sin embargo, esta funcionalidad dual también plantea interesantes desafíos éticos. Es por esta razón que es esencial que los padres comprendan los posibles peligros y riesgos asociados con este gadget.  

Cuando se introduce Flipper Zero en el hogar, es fundamental establecer límites claros y educar a los niños sobre el uso responsable de la tecnología.  

Los padres pueden aprovechar las funciones educativas del equipo como una oportunidad para fomentar la curiosidad tecnológica, siempre y cuando se realice bajo supervisión y con responsabilidad. 

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En última instancia, el Tamagotchi para hackers puede ser tanto un juguete como una herramienta para el aprendizaje, dependiendo de cómo se enfoque su uso. La clave para los padres es la supervisión constante y la educación sobre el uso ético.  

Al final, se trata de una herramienta poderosa y muy útil que puede utilizarse para el bien o para el mal. Por lo que es importante utilizarlo de forma legal, y ser consciente de los peligros potenciales que conlleva su uso.