Desde las míticas historias de autómatas en culturas ancestrales hasta la compleja inteligencia artificial que todos conocen actualmente, el viaje de la humanidad para dotar a las máquinas de un tipo de "inteligencia" ha sido un camino largo y lleno de altibajos que ya se pudo ver en otro reportaje de Computer Hoy.

Este es uno de los campos más emocionantes y prometedores de la tecnología moderna. Pero, ¿cuándo nació realmente la IA? Para comprenderlo, se debe bucear en la naturaleza misma de la inteligencia artificial y las raíces de su concepto.

La idea de máquinas que pueden pensar y aprender como los humanos tiene raíces que se extienden mucho antes de que la tecnología moderna hiciera posible la IA. Uno de los primeros pensadores en explorar esta idea fue el filósofo griego Antiquo Herón de Alejandría, quien vivió en el siglo I d.C. 

Herón creó autómatas que se asemejaban a figuras humanas y animales y eran capaces de realizar tareas simples, como abrir puertas o tocar la flauta. Aunque estos autómatas estaban lejos de la IA moderna, representaron un primer paso hacia la creación de máquinas inteligentes.

• Vale, pero ¿qué es realmente la inteligencia artificial?
• Estos son los orígenes reales de la tecnología que promete cambiar el mundo: la inteligencia artificial

Vale, pero ¿qué es realmente la inteligencia artificial?

La inteligencia artificial (IA) es un campo de la informática que se centra en desarrollar sistemas y máquinas capaces de realizar tareas que, cuando se llevan a cabo por seres humanos, requieren de inteligencia y razonamiento. 

A diferencia de la programación tradicional, donde se definen reglas específicas para que los ordenadores realicen tareas, la IA se basa en la idea de que las máquinas pueden aprender y tomar decisiones por sí mismas a través de la recopilación y análisis de datos.

25 aniversario de Computer Hoy: Inteligencia Artificial, todo lo que nos puede ofrecer en el futuro

Una de las características fundamentales de la inteligencia artificial es su capacidad para aprender y mejorar con la experiencia. Esto se logra mediante algoritmos y modelos matemáticos que permiten a las máquinas identificar patrones en los datos y ajustar su comportamiento en función de esos patrones. 

A medida que se alimenta a los sistemas de IA con más información y datos, se vuelven más precisos y efectivos en la realización de tareas específicas.

La IA se divide en varias ramas y enfoques, cada uno con sus propias aplicaciones y desafíos. Por ejemplo, el aprendizaje automático (machine learning) se enfoca en desarrollar algoritmos que permiten a las máquinas mejorar su rendimiento en una tarea a medida que se les proporciona más información. 

El aprendizaje profundo (deep learning) es una subcategoría del aprendizaje automático que se basa en redes neuronales artificiales y ha demostrado ser especialmente eficaz en tareas como el reconocimiento de voz y la visión por ordenador.

Estos son los orígenes reales de la tecnología que promete cambiar el mundo: la inteligencia artificial

Fue en el siglo XX cuando todo comenzó. Uno de los momentos más influyentes en la historia de la IA fue la publicación del artículo Computing Machinery and Intelligence por el matemático y lógico británico Alan Turing en 1950. 

En este trabajo, Turing propuso la idea de una máquina universal que pudiera simular cualquier proceso de cálculo que un humano pudiera hacer. Esta máquina, que ahora se conoce como la Máquina de Turing, sentó las bases teóricas para la computación moderna y la IA.

Turing también introdujo el famoso Test de Turing, que planteaba la pregunta de si una máquina podía exhibir un comportamiento inteligente indistinguible del de un ser humano. Este test se convirtió en un punto de referencia importante en la búsqueda de la IA.

Dejando atrás las teorías pioneras de Alan Turing, es en el año 1956 cuando se puede marcar el nacimiento de la inteligencia artificial como un concepto genuino y tangible. 

Fue en la Conferencia de Dartmouth donde tres eminentes científicos de la época, John McCarthy, Marvin Minsky y Claude Shannon, bautizaron oficialmente este campo emergente como "la ciencia e ingenio de hacer máquinas inteligentes, especialmente programas de cálculo inteligentes".

En aquel entonces, estos visionarios científicos anticiparon un futuro en el que la sociedad estaría rodeada de máquinas inteligentes en menos de una década. 

El estado actual y el futuro de la Inteligencia Artificial: una visión a corto plazo

Sin embargo, la realidad distó un tanto de esta predicción, ya que la tecnología de la inteligencia artificial dio sus primeros pasos de manera más tímida, sin alcanzar su pleno potencial hasta la década de los años 90, cuando verdaderamente comenzó su era dorada. 

A partir de 1990, las principales empresas tecnológicas comenzaron a realizar inversiones masivas en el campo de la inteligencia artificial. 

Contraseñas e inteligencia artificial: un arma de doble cara que pone en peligro tu seguridad

¿Qué provocó este cambio de rumbo en su percepción? La respuesta radica en la inminente llegada del mundo digital, un escenario en el que las empresas se dieron cuenta de la necesidad apremiante de mejorar su capacidad para procesar y analizar la vasta cantidad de datos que se avecinaba.

Fue entonces cuando IBM, una de las gigantes tecnológicas, dio un paso trascendental al lanzar al mundo a Deep Blue en 1997, un superordenador capaz de derrotar a Garry Kasparov, el campeón mundial de ajedrez. 

Este hito histórico tuvo un impacto tan profundo que se convirtió en tema de películas que exploraban el futuro tecnológico, donde, por supuesto, la inteligencia artificial ocupaba un lugar destacado. Además, en esta década, surgieron los agentes inteligentes, sentando las bases para la creación de sofisticados chatbots y los asistentes virtuales que ahora se conocen.

Más adelante, Watson, otro superordenador de IBM, logró otro hito al ganar el famoso concurso de preguntas y respuestas Jeopardy!. "El ordenador de IBM Watson ha salido victorioso en su enfrentamiento contra el cerebro humano", exclamó el presentador del programa de televisión estadounidense.

Estos fueron los años en los que IBM y Microsoft lideraron la inversión en la innovación de la inteligencia artificial con inversiones sustanciales. Ahora, en un mundo en el que la inteligencia artificial se ha arraigado en las vidas de muchos, desplazando a los humanos en diversas tareas, surge la necesidad de regular la ética en este campo. 

Todas las empresas reconocen la importancia de esta tecnología, pero queda por verse hasta dónde llevará la inteligencia artificial a la humanidad en el futuro.