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Sony Inzone M9, análisis y opinión del monitor híbrido para PS5 y PC

análisis sony inzone m9

Tras una semana jugando y currando a tope en el nuevo monitor de Sony, te traigo el análisis del Inzone M9, un monitor 4K con HDR, un refresco de 144 Hz y dos HDMI 2.1 para que puedas conectar y aprovechar tu PS5 y Xbox Series X.

Sony parece que va a apostar fuerte por los juegos en PC y, además de lanzar algunos de sus títulos en compatibles, este verano se lanza a la piscina con hardware para entornos híbridos de PC y PS5.

Y es que, compañía japonesa acaba de anunciar una nueva familia de auriculares para PC y PS5 (nosotros ya hemos analizado los tope de gama, los Inzone H9) y también dos monitores para disfrutar tanto en su consola como en el ordenador.

Tras una semana jugando a tope en su monitor más avanzado, te cuento mi opinión de este Inzone M9 con 4K, 144 Hz y lo más importante: dos HDMI 2.1 para tus flamantes consolas de actual generación.

Inzone M9
Resolución4K a 144 Hz
RetroiluminaciónFull Array LED en un panel de 27"
Latencia1 ms
HDRDisplayHDR 600
VRRHDMI / G-Sync
Preparado para PS5
Auto WVM Switch
IluminaciónSí, 13 colores
Puertos2 x HDMI 2.1 | DisplayPort 1.4 | USB-C | USB-B | 3 x USB-A | Jack de 3,5 mm
Altavoces2 x 2 W
Precio1.099 euros
 

Apartados del análisis del Sony Inzone M9:

Una peana singular y líneas que casan con PS5

Lo primero que tengo que decirte es que no hace falta una PS5 para sacar partido al monitor, pero está claro que Sony quiere mantener una identidad en su hardware.

Tanto en los Inzone H9 como en este Inzone M9 encontramos unas líneas de diseño que casan a la perfección con lo que vemos en PS5. Así, mantiene ese plástico blanco y con una textura rugosa que vemos en la consol (pero sin la textura de los botones de la consola impresa en el plástico) y partes negras que contrastan con ese blanco.

Vaya, como la propia consola. En términos de diseño, me gusta, aunque está claro que al mirarlo por delante, lo que vas a tener es el panel y el diseño trasero te va a dar un poco igual. Sin embargo, en lo que seguro te fijas es en el soporte.

Es un soporte de tipo trípode que es algo distinto al que solemos tener en monitores donde, normalmente, tenemos dos patas delanteras y una trasera. Aquí es al revés y tenemos la pata grande en la parte central delantera y dos patas de apoyo en los laterales, pero en la zona trasera.

Es un brazo que no es vertical, sino que tiene una ligera inclinación. Sony nos dijo en la presentación que es para que puedas poner tu teclado y ratón en los lados del monitor, como hacen algunos profesionales de esports, pero bueno, cada uno es un mundo y a mi es algo que no me afecta.

Lo que sí me gusta es que en ese brazo tenemos un sistema hidráulico que nos permite elevar el monitor verticalmente, así como un sistema para inclinar la pantalla. Tiene soporte VESA 100 x 100, por lo que puedes usar otros soportes, como uno de pared, y lo que echo de menos en este monitor es que se pueda girar la pantalla.

Creo que, costando 1.100 euros, es algo que el usuario espera encontrar, pero bueno, si no te mueves del setup en el eje horizontal, es un problema que no vas a tener.

En la parte trasera tenemos una barra de disipación pasiva y, además, iluminación de 16 colores en esa barra. Si tienes pegado el monitor a una pared, va a generar cierto efecto interesante, pero no esperes un sistema como el Ambilight de Philips, ya que no estamos ante algo así.

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Lo que me gusta es el modo de control de las opciones del monitor. Ya deberías saber que Sony va muy a su bola en algunos sentidos y, aunque tiene cositas casi futuristas, también hay detalles que son del pasado. Eso lo hemos visto recientemente en el Xperia 1 IV, pero en el caso de este monitor... no hay de qué preocuparse.

¿Por qué te digo esto? Pues porque en la presentación estuve esperando durante toda la sesión una foto que confirmara mis temores: un modo de control del monitor basado en botones, o incluso una horrible barra táctil. Sin embargo, tenemos el sistema que se ha hecho con el estándar actual: un joystick.

Además del botón para encender el monitor, tenemos el joystick que nos permite controlar diferentes aspectos del monitor, subir y bajar el volumen de forma sencilla (tiene dos altavoces que, bueno, cumplen, pero te recomiendo un sistema de sonido aparte).

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Y, curiosamente, los menús de este Sony no son tan complicados como los de sus cámaras y, de hecho, son bastante estándar. Tienes diferentes tecnologías para juegos, opciones de configuración de imagen e idioma y, en definitiva, no tengo queja alguna con este elemento.

Y sí, considero que es un monitor "bonito", sobre todo por esa pata central que cuenta con el motivo de una PS5.

Dos puertos HDMI 2.1 y un completo hub para tu sobremesa o portátil

Antes de pasar a la experiencia con el panel, vamos a hablar un poco de los puertos. Es curioso, pero en algunos de los televisores de Sony que están preparados para PS5 (el XH90 que analizamos en su día), los usuarios hemos tenido que esperar actualizaciones de software para poder usar los HDMI 2.1 al completo.

En este monitor, sin embargo, no solo tenemos un montón de puertos, sino que cuentan con la ultima tecnología. Para empezar, tenemos dos HDMI 2.1, lo que convierte este modelo en uno de los pocos monitores que, simplemente por tener este puerto, está preparado al 100% para la actual generación de consolas.

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Cuenta con VRR y G-Sync y, además de los HDMI, tenemos un DisplayPort 1.4 de tamaño completo para conectar un PC y aprovechar la resolución 4K a 144 Hz en caso de que nuestra GPU no sea compatible con el estándar HDMI 2.1.

En las entradas para jugar, el monitor va servido, pero además tenemos un USB-B, tres USB-A, jack de auriculares y un USB-C. Este es un puerto muy interesante porque nos permite conectar un dispositivo para tener señal de vídeo, pero también para darle potencia de carga. Un portátil, por ejemplo.

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Vas a poder usar el monitor, si lo configuras para tal fin, como un hub, ya que puedes conectar dos ordenadores, o o un ordenador y una consola, y controlar ambos dispositivos con el teclado y ratón conectados directamente al monitor.

Es decir, sin necesidad de cambiar la conexión de los periféricos, vas a poder controlar los dos dispositivos conectados.

Algunas de las últimas tecnologías en monitores y muchas opciones por firmware

Pero bueno, vamos a hablar un poco del panel y de la experiencia jugando, ya que se trata de un monitor que está especialmente enfocado a esa tarea.

Lo primero es que el panel de este M9 es totalmente diferente al del M3 no solo en resolución y refresco, sino en trato de color y, sobre todo, en la retroiluminación. 

En el M9 que hemos analizado tenemos una retroiluminación Full Array, algo que hemos visto en muchos televisores a lo largo de nuestros análisis y que es una ventaja evidente frente a un sistema de retroiluminación más estándar.

Esto permite que las zonas brillantes sean más brillantes y estén más controladas, pero también permite que las zonas oscuras sean... pues eso, más oscuras y, al final, el contraste de la imagen es más rico y mejor para todo tipo de contenidos.

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A nivel de brillo me parece que cumple con creces y cuenta con certificación DisplayHDR 600, lo que permite que veamos contenido en HDR en nuestro PC y consola. No es un monitor tan brillante como ciertos televisores, pero ya sabes que, en este aspecto, los monitores van bastante por detrás de un televisor.

El panel cuenta con resolución 4K en formato 16:9 y tiene un refresco de 144 Hz. Esto lo vas a poder aprovechar con tu PC tanto por HDMI 2.1 como por DisplayPort 1.4, pero también vas a poder tener una muy buena experiencia con tu consola Xbox Series X o PS5.

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Y es que sí, evidentemente el marketing del monitor va a estar enfocado en PS5, pero todas las ventajas de imagen de este monitor las vas a poder aprovechar en tu Xbox Series X. Y, al final, para jugar me parece un muy buen monitor gracias a la calidad de los colores, a los buenos ángulos de visión y a lo nítido que se ve el juego en todo momento.

27" es algo pequeño para según qué usuario y la distancia que haya en el escritorio, pero para muchos otros es el tamaño ideal para, sobre todo, shooters competitivos en primera persona. En este sentido, por firmware tienes algunas ayudas como punteros o la tecnología black equalizer que levanta algo las sombras, pero no es algo que haya utilizado, la verdad.

Y, además, tienes automatismos que ayudan a elegir el mejor HDR en todo momento cuando tenemos conectada la PS5. 

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Ya sabes que es algo que puedes configurar manualmente en cada juego y en la propia pantalla, pero creo que el sistema funciona bastante bien de forma automática, al menos en los juegos que he probado como Spider-Man Miles Morales, Ratchet&Clank una dimensión aparte u Horizon Forbidden West.

No he tenido problema con sangrado en los laterales, pero en mi unidad sí he tenido un pequeño problema en forma de "escape" de luz en un punto concreto de la pantalla, donde se puede ver la matriz de retroiluminación. Este será un problema de mi unidad, que puede pasar, y se nota cuando hay un contenido oscuro en pantalla. 

Si soy sincero, te olvidas de él al estar un rato jugando, pero si fuera una unidad propia, habría pedido un cambio de monitor.

Comodísimo si tienes un MacBook para el día a día, editar foto o vídeo

Está claro que, por características técnicas, este monitor está especialmente diseñado para jugar, pero, también me parece ideal para trabajar. Por colores y resolución, en un sobremesa vas a jugar genial, pero creo que el compañero ideal es un portátil que tenga carga y datos por USB-C.

Lo he estado usando con mi MacBook Pro M1 y con un solo USB-C puedo mandar sonido y vídeo a la pantalla, pero el monitor, a su vez, alimenta el portátil. Puedo cerrar la pantalla perfectamente... y a currar. 

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Al tener USB-B, puedes usar el monitor como su fuese un HUB para hasta dos ordenadores, pero, como digo, lo que más me ha gustado es que, con el monitor en el escritorio, llego a casa, conecto el  portátil simplemente con el cable USB-C y ya tengo tanto señal como carga.

Y bueno, en el día a día he estado editando vídeo y foto, teniendo una muy buena experiencia en este campo. No es el mejor monitor para esto, ya que la cobertura DCI-P3 es del 95% y, seguramente, un calibrado más profesional, pero a nivel profesional "multitarea", como es mi perfil, va genial.

análisis sony inzone m9

Vas a poder editar fotos perfectamente tanto por los colores que maneja como por la resolución 4K y también vas a poder editar vídeo sin problema. Eso sí, echo en falta que sea algo más grande, de 32" o así, pero esto es una opinión muy personal.

Es caro para ser un 27", pero tienen detalles que marcan la diferencia

Llegamos al final del análisis del Sony Inzone M9 y, pese a algunas cositas que no me han parecido tan redondas, lo cierto es que he disfrutado mucho jugando y trabajando esta semana con el monitor.

Creo que lo fundamental, que es la calidad de imagen, está muy bien resuelto gracias a un color que no pega de ser muy vivo de serie, lo que nos da margen para personalizarlo en los ajustes y, además, el panel 4K a 144 Hz con Full Array brilla tanto viendo películas en Blu-ray como a la hora, sobre todo, de jugar.

análisis sony inzone m9

Creo que es un muy buen monitor híbrido de actual generación para un escritorio en el que tengas su PC gaming, tu PS5 o Xbox Series X y también quieras trabajar. Me gusta el diseño, me gusta el trípode y la conexión USB-C con carga para el portátil me ha encantado.

Ahora bien, creo que hay cositas a mejorar como la inclusión de cableado de cortesía (entiendo que no un HDMI 2.1, ya que eso viene con PS5, pero un USB-C o un DisplayPort 1.4, por favor, Sony) o la reducción del tamaño de la fuente de alimentación, que es enorme.

Y sí, es caro, 1.100 euros por un monitor de 27", pero es el precio a pagar, actualmente, por un monitor con estas características y conexión HDMI 2.1

Sony Inzone M9

El Sony Inzone M9 es un monitor 4K a 144 Hz que cuenta con retroiluminación Full Array LED y DisplayHDR 600.
Inzone M9

Para que te hagas una idea, Asus es una de las que también ha apostado fuerte por esta tecnología y su ROG Swift PG32UQ tiene un precio de, también, unos 1.000 euros ahora mismo con características muy similares al Inzone M9 y 32". 

Así que, está claro que si quieres HDMI 2.1 en un monitor, toca pagarlo, pero al final la "noticia" es que Sony entra en el hardware gaming para PC y, al menos con este primer paso, la dirección es la adecuada.

Nuestra valoración

Lo mejor

  • Puertos, sobre todo los HDMI 2.1
  • Calidad del panel
  • Diseño elegante
  • Conexión y carga USB-C

Lo peor

  • Sin cableado de cortesía
  • Recorrido vertical algo escaso
  • Precio para ser un 27"
92

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