La NASA no escatima en esfuerzos a la hora de explorar la superficie de Marte, y los científicos de todo el mundo se emplean a fondo por analizar en profundidad cada una de las fotos que llegan a la Tierra del planeta rojo. Algunas de ellas, tan curiosas como la que ha llevado a cabo el rover Perseverance, y que ha despertado un enorme revuelo entre el público. 

No es para menos, puesto que, al menos a primera vista, la fotografía tomada en el cráter conocido como Jezero de Marte tiene un aspecto fácilmente identificable. 

No obstante, antes de que nadie pudiese interpretarlo como una prueba evidente de que definitivamente hay vida en el planeta vecino, los expertos han explicado qué es en realidad la “seta” que han descubierto.

Una misteriosa seta en Marte

Desde que la humanidad tuvo la capacidad de asomarse a los misterios de Marte, muchas han sido las fotografías que han generado interés, y de paso han permitido soñar con descubrimientos asombrosos. Desde la más que conocida cara de Marte (que la ciencia ya desmontó en su momento), hasta unos supuestos hilos con forma de espaguetis. 

Pero sin duda uno de los objetos hallados en suelo marciano más sorprendentes lo ha revelado el rover Perseverance en su continuo estudio del mismo. 

Se trata de una pieza que fácilmente podría confundirse con una seta o un hongo, al tener un aspecto prácticamente idéntico al que estos tienen cuando brotan en la Tierra. Sin embargo, no, su naturaleza no es tan “viva”.

Tal y como cabría esperarse, si se tiene en cuenta la composición de Marte, se trata de una roca. Eso sí, una bastante singular. 

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Según han calculado los expertos, tendría aproximadamente entre 1 y 2 centímetros de alto y algo menos de 1 centímetro de ancho. Pero la gran pregunta es: ¿por qué la piedra tiene forma de seta, y cómo se llegó a formar?

Para explicarlo, hay que recurrir a un fenómeno que también se produce en la Tierra, y que responde al nombre de concreción. Este término se utiliza cuando una estructura rocosa distintiva se forma mediante la precipitación de minerales alrededor de un núcleo central en capas concéntricas. Lo curioso es que estas estructuras pueden tener formas muy diversas y curiosas, también de seta.

Conocer más del suelo marciano

Básicamente, las concreciones se forman por lo general en entornos sedimentarios, donde los minerales disueltos en el agua subterránea se depositan alrededor de un grano de arena, piedra u otro material, creando gradualmente una capa mineralizada. Con el tiempo, estas capas se solidifican y forman lo que se conoce como una concreción.

En la propia Tierra, estas están bien definidas, y su tamaño varía muchísimo, existiendo desde las que apenas tienen unos pocos centímetros hasta otras de varios metros de altura. Este nuevo descubrimiento, por su parte, puede ser un punto de partida para conocer cómo las concreciones se llevan a cabo en Marte. 

Los científicos tienen claro que el viento marciano fue lo que erosiono la roca con el paso del tiempo, pero sí han reconocido que, al menos por el momento, no saben “cuándo se formó exactamente esta peculiar seta”.