Como ya muchos sabrán, el potencial de energía solar en nuestro país es enorme y muy prometedor. Sin embargo, a pesar de contar con uno de los mejores recursos de Europa, el país se enfrenta a grandes problemas que obstaculizan su pleno aprovechamiento. 

El desperdicio de energía solar en España continúa siendo un problema que se está produciendo debido a varios factores, incluyendo las leyes del autoconsumo y las limitaciones de la red eléctrica, mientras se sigue dependiendo del gas y los combustibles fósiles.

Antes de la aprobación del Real Decreto de Autoconsumo en 2019, existían barreras y restricciones que dificultaban la instalación de sistemas de autoconsumo solar en España. Estas restricciones incluían el llamado “impuesto al sol”, que entorpecía la generación de electricidad para consumo propio.

Aunque el Real Decreto de Autoconsumo eliminó este impuesto y estableció un marco regulatorio más favorable para el autoconsumo, aún existen problemáticas que limitan su desarrollo al completo y de forma 100% efectiva. 

Esta podría ser la mejor alternativa para almacenar energías renovables

Tal y como indica La Vanguardia, España desperdició 1.067 GWh, por un valor de 160 millones de euros, en el 2022 por el autoconsumo, según los cálculos realizados por la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA).

“España desaprovecha el 19% de la energía de autoconsumo instalada, sobre todo en instalaciones industriales y el motivo está en las dificultades que los propietarios de esas plantas de autoconsumo tienen para volcar sus excedentes a la red”, explica Jon Macías Santiago, presidente de APPA Autoconsumo.

“Se produce, principalmente, por las barreras regulatorias y técnicas que impiden el vertido de excedentes en las instalaciones con potencia superior a 100 kW y/o con suministros en alta tensión. 1.067 GWh desaprovechados, equivalentes al 0,4% de la demanda eléctrica, y que, según precios de mercado y considerando el coeficiente de apuntamiento de la solar fotovoltaica, tienen un valor equivalente a 160 millones de euros”, añade en su informe.

Vaga infraestructura y leyes aún restrictivas suponen 160 millones de euros de energía solar tirada a la basura 

“Estamos viviendo una revolución energética sin precedentes. Que se hayan instalado 2.649 MW de generación limpia y distribuida es bueno, pero lo importante son los más de 217.000 nuevos hogares que se han convertido, en 2022, en apóstoles de una nueva forma de generar y consumir energía”, declarara Jon Macías.

Sin embargo, y pese a estas buenas noticias, el hecho de que España siga dependiendo del gas y los combustibles fósiles a pesar de contar con un gran potencial solar se debe en parte a la problemática del desperdicio, entre otras. 

Durante un mes, mi casa ha sido un hogar inteligente: así es vivir con Alexa como compañera de piso

La producción y distribución de energía solar a gran escala requiere de la misma forma grandes inversiones en infraestructura, como parques solares y una red eléctrica, y a menudo enfrenta obstáculos regulatorios y de planificación.

La capacidad de la red eléctrica actual para integrar y gestionar la energía generada por sistemas de autoconsumo es limitada. La infraestructura no está preparada para absorber grandes cantidades de energía solar generada por los usuarios.

¿Sería viable cargar un coche eléctrico en casa solo con paneles solares?

Por otro lado, está el problema de verte el excedente a la red eléctrica a cambio de una compensación. “Este tipo de compensación es el que más interesa a particulares y empresas que tengan instalaciones pequeñas (hasta 100 kW) y quieran obtener un ahorro extra al verter su energía a la red”, explican desde Atersa.

Aquí el problema del desperdicio radica sobre todo en las grandes empresas.”Muchas ni siquiera se diseñan con capacidad para volcar a la red los excedentes y otras, las mayores de 100 kW se enfrenta a problemas de acceso por falta de capacidad en los nodos de conexión porque están saturados o tan lejos de la instalación que a la industria no le sale a cuenta abordar esa inversión”, explica José María González Moya, director general de APPA renovables.

Green iT: La tecnología al servicio del medio ambiente

Un sentimiento positivo de cara a los próximos años

Durante el año 2022, el sector industrial, incluyendo comercios y empresas públicas, han experimentado un gran crecimiento en la adopción de instalaciones de autoconsumo fotovoltaico. Se sumaron un total de 23.096 nuevas instalaciones, superando en volumen a las residenciales, lo que representa el 61% del total instalado, equivalente a 1.625 MW.

La concienciación sobre los beneficios del autoconsumo ha aumentado significativamente, incluso entre las comunidades de vecinos. En 2022, muchas han comprendido las ventajas que esta modalidad ofrece y se prevé que siga creciendo de cara a 2023 hacia adelante.

Para entonces, la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA) confía en que el progreso continúe, pero es necesario seguir invirtiendo en el desarrollo y perfeccionamiento de la red eléctrica, así como una mejora en la regulación que respalde el autoconsumo fotovoltaico.