Albert Einstein, ese genio de la física que desarrolló la teoría de la relatividad, nos dejó muchas predicciones a lo largo de su vida. Aunque muchas se han confirmado, otras parecían destinadas a quedarse en el terreno de la teoría. Hasta ahora. En un reciente giro de los acontecimientos, los astrónomos han descubierto un fenómeno que incluso Einstein dudaba que pudiéramos ver algún día.

Imagina que observas a través de un telescopio el espacio y te encuentras con una cruz brillante en el cielo. No, no se trata de ninguna constelación. Se llama Cruz de Einstein, una rara configuración causada por la lente gravitacional. 

Descubren un elemento presente en la Tierra en el exoplaneta KELT-9b, el “más caliente” de la Galaxia

En términos simples, cuando una galaxia masiva se encuentra entre nosotros y una fuente de luz más distante, actúa como una lente, doblando y amplificando esa luz. Si los reflejos son equidistantes y la masa elíptica, conforman un patrón que recuerda a una cruz. La conocida como Cruz de Einstein, uno de los fenómenos más bellos del espacio.

La gravedad de las galaxias curvan el espacio-tiempo y lo deforman. Generalmente, la luz que atraviesa las lentes es manchada o crea formas como anillos. Es muy extraño encontrar una alineación perfecta de cuatro puntos.

Los científicos no solo revelaron esta Cruz de Einstein, sino que también encontraron más misterios. Según un estudio publicado en The Astrophysical Journal Letters, dentro de este sistema, los investigadores encontraron halos oscuros, regiones subgalácticas, que se podrían considerar como los "fantasmas" del universo, y que solo se pueden detectar gracias a técnicas de imagen gravitacional.

“Este sistema nos brinda una oportunidad única para probar el enfoque de imagen gravitacional en la detección y medición de la masa oscura a nivel subgaláctico”, destacaron los investigadores. Es como si estuviéramos usando gafas especiales que nos permiten ver cosas en el universo que, de otra manera, permanecerían invisibles.

El telescopio espacial James Webb ha detectado el cúmulo de galaxias más lejano jamás visto

Los análisis de la luz, pixel a pixel, descubrieron detalles sobre la antigüedad y la estructura química de ambas galaxias. A pesar de su distante ubicación a once mil millones de años luz, la galaxia azul resplandece intensamente debido a su constante formación de estrellas. 

Comúnmente, las galaxias tan alejadas adquieren una tonalidad roja porque, con la expansión del universo, sus ondas luminosas se alargan. Sin embargo, la galaxia naranja, más cercana a nosotros a unos cinco mil millones de años luz, muestra un tono más rojo. Esto se debe a la presencia de polvo y estrellas más antiguas en su interior.

Para modelar el sistema utilizaron un superordenador con inteligencia artificial

Otro dato fascinante es la velocidad a la que se pudo modelar este fenómeno gracias a la tecnología actual. Utilizando el superordenador Perlmutter, que utiliza inteligencia artificial, lograron modelar este sistema gravitacional en tan solo 55 segundos. 

Es importante resaltar que este tipo de descubrimientos no solo nos acerca más a entender los misterios del universo, sino que también reafirma el poder de la ciencia y la tecnología trabajando juntas. 

Y aunque Albert Einstein quizás pensó que nunca veríamos este fenómeno, hoy, gracias a la tenacidad de los astrónomos y a los avances tecnológicos, podemos decir con orgullo que el físico más famoso de todos los tiempoes estaba, en este caso, equivocado.