Tres grandes lecciones del discurso más mítico de Steve Jobs que nunca deberías olvidar
Jobs cautivó al público con un inspirador discurso en el que compartió tres historias personales que dejaron una profunda huella en su vida y carrera. Estas experiencias siguen siendo valiosas lecciones para muchas personas.
El mítico discurso de graduación de Steve Jobs en la Universidad de Stanford el 12 de junio de 2005 se ha convertido en una fuente de inspiración para personas de todo el mundo. Su enfoque sincero y sus palabras poderosas resonaron en los corazones de los graduados y de todas las personas que le escucharon.
El cofundador y entonces director ejecutivo de Apple, compartió tres historias personales que encarnaban importantes lecciones sobre el seguimiento de la pasión, la superación de obstáculos y la búsqueda de una vida auténtica.
Dieciocho años han pasado desde que se pronunció aquel discurso que perdura en la memoria de muchas personas. Sin embargo, a pesar del tiempo transcurrido, las palabras de Jobs continúan resonando en la actualidad, las cuales han sido clave para tener éxito y ser feliz.
Las enseñanzas de Steve Jobs que siguen resonando hoy
Cabe señalar que en el discurso de 15 minutos, Steve Jobs compartió ideas revolucionarias y perspicaces, desde la importancia de perseguir tus pasiones hasta la necesidad de enfrentar obstáculos con valentía, pero sobre todo con persistencia.
El mensaje central trasciende las limitaciones del tiempo y el contexto, donde recuerda que el acceso hacia el éxito y la realización personal está marcado por el coraje de seguir tu propio camino. Todo está en la satisfacción interna y en la capacidad de hacer una diferencia en el mundo.
Confía en que los puntos se conectarán de alguna manera
El discurso inicial comienza con las razones detrás de su elección de abandonar la universidad. Tras medio año en la institución, Jobs admitió sentirse perdido en cuanto a su rumbo en la vida y no lograba vislumbrar cómo la universidad podría contribuir en su desarrollo personal.
En lugar de continuar recibiendo el apoyo económico de sus padres son una clara dirección, decidió abandonar sus estudios. Esta decisión fue un punto de inflexión en su trayectoria, demostrando su confianza en buscar su propio camino hacia el éxito y la autorrealización.
“Decidí dejarlo todo y confiar en que saldría bien. Muchas de las experiencias a las que me abrí paso siguiendo mi curiosidad e intuición resultaron ser de valor incalculable en el futuro”.
Un ejemplo destacado fue su experiencia en una clase de caligrafía, donde adquirió conocimientos sobre tipografía y diseño. En ese momento, parecía un desvío aleatorio en su educación, pero más adelante se convertiría en una marca registrada de los productos de Apple.
Steve Jobs reconocía la importancia de conectar los puntos retrospectivamente y cómo incluso las experiencias aparentemente insignificantes pueden generar un impacto significativo en el camino hacia el éxito.
“Si no hubiera abandonado los estudios, nunca habría asistido a esa clase de caligrafía, y los ordenadores personales no tendrían la maravillosa tipografía que tienen. Tienes que confiar en que los puntos se unirán de alguna manera en tu futuro. Tienes que confiar en algo: tu instinto, el destino, la vida, el karma, lo que sea”.
Encuentra lo que amas
La segunda lección compartida por Steve Jobs narró el instante en el que fue despedido de Apple, de su propia compañía. Después de una década, él y su socio Steve Wozniak transformaron un modesto emprendimiento en un exitoso imperio valorado en miles de millones de dólares, según destacó Jobs durante su discurso.
No obstante, cuando Steve Jobs alcanzó los 30 años de edad, se encontró con la difícil situación de ser forzado a abandonar la compañía que el mismo ayudo a construir. “No lo vi entonces, pero resultó que ser despedido de Apple fue lo mejor que me podía haber pasado”, afirmó ante los graduados.
En su discurso, Jobs compartió una experiencia transformadora que lo llevó a un periodo de gran creatividad en su vida, durante el cual fundó dos empresas y se enamoró profundamente de su trabajo. Más adelante, una de esas empresas fue adquirida por Apple y regresó a la compañía.
“En ocasiones, la vida puede golpearte con fuerza inesperada. Pero no debes perder la fe”. En su testimonio, destacó la importancia de armar lo que se hace y cómo esa pasión fue lo que lo mantuvo en marcha. Steve Jobs enfatizó que es fundamental encontrar aquello que se ama, tanto en el ámbito laboral como en lo personal.
La muerte es el destino que todos compartimos
La última historia compartida durante su discurso de graduación reveló el impacto que tuvo en él el diagnóstico de cáncer de páncreas. Compartió que desde su adolescencia, adoptó la mentalidad de vivir cada día como si fuera el último, utilizando esta motivación como guía para tomar decisiones significativas en su vida.
“Recordar que vas a morir es la mejor forma que conozco de evitar la trampa de pensar que tienes algo que perder. Ya estás desnudo. No hay razón para no seguir tu corazón”.
Cuándo recibió el diagnóstico de cáncer de páncreas en 2004 marcó un punto crucial en su vida. En un principio, se le informó que su enfermedad era incurable y que le quedaban apenas unos meses de vida. Sin embargo, posteriormente, una biopsia reveló que existía la posibilidad de tratar el cáncer mediante cirugía.
Este encuentro cercano con la muerte le brindó una certeza profunda y significativa, y fue esa certeza la que le impulsó a compartir su perspectiva con los graduados. Trágicamente, Steve Jobs falleció en 2011 debido a complicaciones relacionadas con la enfermedad.
Steve Jobs y su obsesión por lo perfecto: dos semanas de discusiones para elegir una simple lavadora
“La muerte es el destino que todos compartimos. Nadie ha escapado nunca. Y si así es como debería ser, porque la muerte es muy probablemente el mejor invento de la vida. Tu tiempo es limitado, así que no lo desperdicies viviendo la vida de otra persona. No dejes que el ruido de las opiniones de los demás ahogue tu propia voz interior”.
El discurso de Steve Jobs en la graduación de Stanford nos deja lecciones valiosas sobre la importancia de seguir nuestra pasión, superar los obstáculos, confiar en nuestra intuición y vivir con plenitud. Sus palabras continúan siendo una fuente de inspiración para todas las personas que buscan alcanzar su máximo potencial.
Otros artículos interesantes:
Descubre más sobre Juan Manuel Delgado, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Computerhoy.