Las IPTV están en continua lucha en España y organizaciones como LaLiga han empezado a enviar las primeras denuncias a los cardsharers que difundían partidos sin licencia. 

Los piratas han apostado por este sistema en los últimos años y la Unión Europea estudia cómo gestionar los derechos de autor.

Algunos países como Italia han empezado a utilizar su propio sistema de bloqueo de IPTV, aunque ha resultado ser un caos ya que elimina las direcciones legales. En Reino Unido es el propio Google quien bloquea algunas direcciones maliciosas.

La táctica de Reino Unido para acabar con las IPTV piratas ha sido muy simple: bloquear el acceso de los usuarios desde las búsquedas de Google. 

El gigante tecnológico ha elaborado una lista de las webs que difunden contenido ilegal y ha empezado a limitar el acceso a miles de los resultados que aparecen en el buscador. 

Google habría bloqueado más de 10.000 dominios y subdominios, según ha informado TorrentFreak, aunque la cifra podría ser mayor. Esto significa que las páginas o plataformas de suscripción no aparecen en los resultados de una búsqueda, pero no se han eliminado por completo. 

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A efectos prácticos, las webs han desaparecido de internet puesto que el navegador no las muestra en móviles y ordenadores. 

Las páginas siguen abiertas y están operativas, así que los usuarios pueden acceder a ellas si conocen la dirección o desde un buscador alternativo.

Google nuevo aliado para acabar con las IPTV

Esta medida ha sorprendido viniendo de Google ya que la compañía siempre se ha negado a eliminar enlaces sin una orden judicial. 

La empresa cree en la libertad de información y rechaza la censura incluso cuando llega de los gobiernos, pero parece que está cambiando en los últimos años.

Google ha pasado a convertirse en una de las empresas que más están luchando por preservar los derechos de autor y de emisión. El gigante tecnológico ha empezado a bloquear enlaces de webs que alojan contenido pirata y que publicitan servicios de IPTV pirata.

Por el momento se desconoce si la compañía estaría dispuesta a tomar medidas más serias para bloquear las IPTV, incluso cerrarlas llegado el momento. Reino Unido puede sentar un precedente en el que se pueden fijar otros países como España.