Todos los hogares están cada vez más conectados con dispositivos inteligentes y electrodomésticos que hacen tu vida más cómoda, simple y eficiente. Sin embargo, esta comodidad tiene un costo, y no solo nos referimos al precio de adquisición de los productos, sino que dejar conectados todos estos aparatos puede afectar considerablemente al precio final de la factura. 

La inflación y el aumento de los precios del gas natural han generado un impacto significativo en las facturas de servicios públicos, y la electricidad no es una excepción. 

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Al ver la factura de luz, a menudo puedes sorprenderte por la cantidad adeudada, y gran parte de ellos se debe al consumo energético de los dispositivos conectados. 

Para tomar el control de la factura y reducir su coste, es esencial entender cómo los electrodomésticos y cualquier dispositivo conectado al tomacorriente afectan el consumo de electricidad. Un primer paso para reducirlo es saber que hay ciertos dispositivos que todavía gastan energía incluso después de haberlos apagado, esto incluyen ordenadores, Smart TV, consolas de videojuegos, etc. 

Cómo reducir el consumo innecesario y ahorrar en tu factura de la luz

Desenchufar los dispositivos que no estás utilizando activamente es una de las formas más simples y efectivas de reducir el consumo de energía. Muchos equipos continúan consumiendo electricidad incluso cuando están apagados en modo de espera o standby, por lo que desenchufarlos por completo puede evitar la carga inactiva. 

Si no estás seguro de que electrodomésticos y otros dispositivos están contribuyendo en un aumento de precio en tu factura, a continuación te presentamos un listado de todos los electrodomésticos y dispositivos que debes desenchufar de la corriente ahora mismo y aquellos en los cuales debes revisar la configuración de energía: 

• Acuarios: Si bien no puedes desconectar el acuario, considera invertir en una bomba de ahorro de energía para reducir los costes. 
• Decodificador: Si buscas reducir aún más tu consumo energético, una opción es desconectar las cajas o decodificadores que no usas regularmente. 
• Equipos de audio: Desconectar los dispositivos de audio cuando no están en uso, como amplificadores o equipos de música, es una forma sencilla de ahorrar dinero en la factura de la luz. 
• Ventiladores: Al desconectar los ventiladores ayudarás a ahorrar energía y reducir el consumo eléctrico. 
• Luces: Apaga las luces cuando estén en uso o apóyate de un temporizador para que se apaguen automáticamente. No hay necesidad de mantener una luz encendida innecesariamente todo el día. 
• Smart TV: Desenchufa los televisores que no utilizas regularmente, como los de las habitaciones de invitados. 
• Ordenador de escritorio: Configura la opción de suspensión automática para que el ordenador entre en reposo después de 30 minutos de inactividad y apágalo cuando hayas terminado de utilizarlo.
• Ordenador portátil: Desenchufa el cable de tu portátil cuando no lo estés usando para evitar el consumo innecesario de energía. 
• Router WiFi: Desconectar el router WiFi antes de ir a dormir es una buena manera de ahorrar energía, no es necesario tener acceso a Internet mientras duermes.
• Cargadores: Desenchufa el cargador cuando no estés cargando tu móvil o tablet, es uno de los accesorios que sigue consumiendo energía cuando no está en uso. 
• Consolas de videojuegos: Las consolas, como la PS5 o la Xbox Series X consumen mucha energía incluso cuando no estás jugando con ellas. Se recomienda desenchufarlas y desactivar el modo de encendido instantáneo. 
• Impresora: Desconecta tu impresora cuando no la uses, ya que a menudo está en modo de espera y consume energía innecesaria.

Los electrodomésticos son responsables de una parte significativa del consumo de energía en los hogares. Algunos modelos utilizan cantidades considerablemente más altas de energía y, por lo tanto, es fundamental tomar medidas para reducir su impacto en el consumo energético diario. 

Un punto importante a mencionar es que los refrigeradores, lavadoras, secadoras, lavavajillas y hornos son los que más energía consumen, ya que suelen funcionar durante largos períodos de tiempo y suelen estar conectados a la corriente eléctrica de forma continua. 

Desenchufarlos cuando no estés en casa o cuando no los utilices es una forma efectiva de evitar que la factura de la luz llegue más alta de lo habitual. A continuación, te presentamos los electrodomésticos que debes desenchufar obligatoriamente cuando no estén en uso: 

• Aire acondicionado: Asegúrate de apagar completamente el sistema de aire acondicionado cuando no haya nadie en casa y, durante los meses más fríos. 
• Secadora: Para reducir costes, y si el clima lo permite, pon las sábanas al aire libre para que se sequen al sol y puedas ahorrar un poco de dinero en la factura eléctrica. 
• Horno de cocina eléctrico: Un horno eléctrico consume alrededor de 1.9 kW por hora, lo que puede representar un gasto de hasta 20 euros al mes. 
• Horno de microondas: Desenchufa el microondas cuando no lo uses, ya que consume energía incluso cuando no está en funcionamiento.
• Refrigerador: En la mayoría de los casos es imposible desenchufar el refrigerador, pero mantener los alimentos cubiertos para evitar la liberación de humedad, obliga al compresor a trabajar menos. Puedes optar por tomar decisiones rápidas sobre lo que necesitas antes de abrir la puerta para minimizar el tiempo que permanece abierta. 
• Lavavajillas: Utilizarlo solo cuando esté completamente lleno te ayudará a ahorrar energía, y también puedes optar por lavar los platos a mano cuando no haya suficientes para justificar el uso del lavavajillas.
• Cafetera: Desenchufa tu cafetera cuando no la uses, ya que consume mucha energía. Si tienes una cafetera automática o de cápsulas, conecta un temporizador para ahorrar en los costes de energía en espera.

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En resumen, aunque apagues el televisor, los electrodomésticos de cocina y mantener los cargadores en el enchufe, a menudo siguen consumiendo energía en modo de espera. Para tener a raya esta situación se recomienda desconectarlos completamente o utilizar una regleta con interruptor para evitar el consumo adicional.

Recuerda que cada pequeño cambio cuenta a la hora de reducir la carga inactiva y controlar tu consumo de luz. Al implementar estas medidas, podrás tener un mayor control sobre tu factura y al mismo tiempo contribuir al cuidado del medioambiente.