Si has sentido que alguien te manipula en una relación o has notado que tu pareja usa frases que te hacen sentir culpable, confundido o inseguro, es probable que puedas estar ante una caso de manipulación emocional. 

Es una forma de abuso psicológico que puede tener graves consecuencias para tu salud mental y tu autoestima. Cabe mencionar que las personas que ejercen este hábito utilizan estrategias sutiles para influir en el comportamiento, las emociones o las decisiones de otra persona. 

El manipulador, que suele ser inseguro, egoísta y con baja autoestima, busca obtener un beneficio a costa de la otra persona, sin importarle el daño que le pueda causar, necesita controlar a los demás par sentirse superior. Y lo hace con diferentes técnicas, como la mentira, la culpa, el chantaje, la intimidación o la victimización. 

La situación puede darse en cualquier tipo de relación: de pareja, familiar, laboral, de amistad, etc. No obstante, los casos más frecuentes y dañinos son en las relaciones de pareja, ya que se aprovecha del vínculo afectivo, así como de la confianza que se supone que existe entre ambos. 

Este estudio desvela la generación con la que es más difícil trabajar

Las frases que más utilizan las personas manipuladoras

En ciertas situaciones, estas dinámicas trascienden las dificultades comunes y se adentran en ámbitos potencialmente nocivos. Un ejemplo claro de esto son las relaciones con individuos manipuladores, quienes emplean tácticas psicológicas para ejercer control y ejercer poder sobre otros. 

Una de las formas más usuales en que los manipuladores ejercen su control es a través del lenguaje. Hay ciertas frases que utilizan con frecuencia para confundir, invalidar y controlar a sus víctimas. Reconocer y entender estas dinámicas es crucial para fomentar relaciones saludables y proteger la integridad personal.

La Universidad de Harvard, Estados Unidos, reconocida por sus investigaciones en temas de relevancia social, ha llevado a cabo un estudio interesante sobre la manipulación en las relaciones interpersonales. 

En este estudio, la psicóloga Cortney S. Warren, de la Escuela de Medicina de Harvard, especializada en adicciones amorosas y rupturas, lideró la investigación. 

En su trabajo, identificó cinco frases que emplean las personas manipuladoras en relaciones de pareja y propuso respuestas saludables que permiten defender los propios derechos y límites sin entrar en juego del manipulador.

1. Estás loco/a: Esta frase es una forma de hacer dudar a la víctima de su propia capacidad de pensar con claridad. El manipulador intenta hacer que la otra persona se sienta inestable, para que sea más susceptible a su influencia. 

• Cómo responder: "Por favor, no cuestiones mi capacidad de pensar con claridad" o "Incluso si no estamos de acuerdo, yo veo la realidad de esta manera". 

2. No te preocupes: Cabe señalar que esta frase se utiliza para minimizar o invalidar los sentimientos de la víctima. Se intenta hacer que la otra persona sienta que sus sentimientos no son importantes.

• Cómo responder: "Estoy preocupado/a" o "Tus sentimientos son válidos"

3. Fue un chiste: Otra de las frases que justifica comentarios o comportamientos hirientes. El objetivo es hacer que la otra persona se sienta culpable por haberse sentido ofendido. 

• Cómo responder: "Ese comentario fue divertido para ti, pero hirió mis sentimientos" o "No sentí que fuera un chiste, te pido que no me hables así". 

4. Tú me obligaste a hacerlo: Esta frase es para evadir la responsabilidad de las propias acciones y hacer sentir culpable a la víctima por su comportamiento. 

• Cómo responder: "En realidad, no puedo obligarte a hacer nada" o "Tu comportamiento refleja tus elecciones, no las mías". 

5. No me importa: El manipulador intenta hacer que la otra persona se sienta irrelevante o sin valor. Utiliza la frase para desestimar los sentimientos o las necesidades.

• Cómo responder: "Sí te importa" o "Me importa".

Esto es lo que tienes que hacer en tu vida para ser más feliz, según un investigador de Harvard

Es fundamental señalar que si te sientes manipulado/a, hay algunas cosas que puedes llevar a cabo, como por ejemplo, una vez que seas consciente de las tácticas que utilizan este tipo de personas, será más fácil identificarlas y responderlas. 

Además, puedes decir al manipulador lo que estás dispuesto a aceptar y lo que no. Una opción es buscar apoyo, ya sea que hables con un amigo, un familiar o un terapeuta sobre lo que está pasando. 

Si nada de lo anterior funciona, es mejor acudir con un especialista o incluso con las autoridades correspondientes si la situación se torna violenta. Es importante recordar que tienes derecho a un trato digno y respetuoso, y no estás obligado/a a soportar manipulaciones de ninguna índole. 

Tu bienestar, pero sobre todo tu autoestima son prioritarios, y establecer límites saludables es un paso fundamental para cuidar de tu integridad tato emocional como mental.