Japón quiere luchar contra el absentismo escolar dado que son cada vez más los niños y niñas quienes no asisten a clase y prefieren quedarse en casa debido a cuestiones como el acoso o la ansiedad.

En concreto la ciudad japonesa Kumamoto, situada al suroeste del país, planea instalar robots en algunas escuelas para ayudar a los alumnos que estudian en casa a sentirse más incluidos y menos ansiosos.

Esta iniciativa incluye varios robots de 1 m de altura, que están equipados con cámaras y micrófonos, y que van a permitir la comunicación bidireccional entre lo que sucede en clase y los alumnos que están en sus casas.

Estas máquinas son autopropulsadas, es decir, se mueven solas, incluso pueden pasearse libremente por la escuela, incluso participar en eventos escolares, haciendo que igualmente los niños que estén en casa no pierdan detalle de los eventos.

“La comunicación a través de estos robots no es completamente real, pero al menos puede dar una cierta sensación de realidad a los niños que todavía están inseguros y temen interactuar con los demás”, dijo a AFP Maki Yoshizato, un funcionario de la ciudad de Kumamoto.

El país ha experimentado un aumento en el número de niños y niñas que no asisten a la escuela en todo Japón. No obstante, el número de alumnos que faltaron a clases en escuelas primarias y secundarias alcanzó un máximo histórico de casi 245.000 en el año fiscal 2021, según el Ministerio de Educación del país.

Y con esta iniciativa de los robots, que empezarán a implementarse a principios de noviembre, esperan que los niños que no asisten a clase y que estén en casa se sientan cada vez más atraídos para volver a las aulas con todos sus compañeros.