La actualidad tecnológica parece que tiene dedicado un espacio en solitario para el tan famoso Flipper Zero, conocido también como el "Tamagotchi de los 'hackers'". Este pequeño gadget, más allá de su apariencia discreta, encierra un mundo de posibilidades en el ámbito de la seguridad.

"Todo el mundo quiere ser un 'hacker', pero no todo el mundo sabe cómo convertirse en uno. Queríamos demostrar que la piratería es en realidad para el uso diario y que no es una cosa maligna. Solo es un conjunto de habilidades como cualquiera", afirma Alexander Kulagin, uno de los creadores.

Desde la idea original de Kickstarter hasta un producto completamente perfeccionado, Flipper Zero es una bestia dentro de un pequeño dispositivo. En su diminuta carcasa, contiene múltiples sensores y diferentes protocolos digitales. Esto incluye aspectos como RFID y NFC, que se pueden usar para emular tarjetas o escanear tarjetas de hoteles.

La parte más divertida es que cuenta con un curioso delfín cibernético al que le encanta hackear y que crecerá mientras interactúas con sistemas digitales en la vida real. Tus acciones construirán su personalidad y siempre se divertirá y comentará sobre ellas, como si de un Tamagotchi de los años 90 se tratase.

"Es posible que si todo el mundo fuera consciente de lo fácil que puede ser burlar ciertas medidas de seguridad, sería más sencillo aprobar inversiones y presupuestos dirigidos a la implementación de ciberseguridad tanto en el ámbito doméstico como en el de las Administraciones Públicas o el sector privado", explica en una entrevista para Computer Hoy Miguel López, Director General de Barracuda Networks.

"Se debería informar más sobre las consecuencias de su uso al margen de la legalidad"

Sin embargo, y pese a toda esta locura generada alrededor de este dispositivo, parece que las cosas se están poniendo algo turbias. Su fama ha levantado tanto amor como odio entre la sociedad. Sin ir más lejos, Amazon directamente ha decidido dejar de vender este producto.

Algunos argumentan que este dispositivo hace que la piratería sea demasiado accesible, permitiendo que incluso personas con conocimientos básicos pueden manipular dispositivos como deseen. Otros argumentan que es una herramienta que, sin duda, se utilizará en gran medida para fines ilegales.

"Flipper Zero no es más que una herramienta y como tal puede usarse de muchas maneras. No se prohíben los martillos porque eventualmente puedan usarse como arma… De igual modo, no creo que se debiera prohibir Flipper Zero aunque quizás sí informar más sobre las consecuencias de su uso al margen de la legalidad", comenta Miguel López.

En agosto, se informó que la policía de Dakota del Sur emitió una advertencia a otras agencias sobre la posibilidad de que se utilizara para piratear las redes de energía. Además, en varios países, incluyendo Estados Unidos y Brasil, la policía ha confiscado envíos de Flipper Zero.

Sin ir más lejos, hace pocas semanas se conoció un nuevo uso para este pequeño "juguete". Un firmware de terceros denominado Xtrem permite al Flipper Zero llevar a cabo ataques de denegación de servicio en dispositivos Android, bombardeando con notificaciones un móvil cuando es´ta en el rango del Flipper Zero. 

"En la mayoría de los casos sus posibles aplicaciones 'perversas' son escasas y entrarían más en el terreno de la 'gamberrada' (ojo que algunas de estas gamberradas pueden ser punibles), que realmente en el del ciberataque. Existen otras herramientas cuyo uso podría ser mucho más peligroso pero que, afortunadamente, no cuentan con esta popularidad", comenta el experto.

Si bien la herramienta puede comercializarse entre piratas informáticos éticos profesionales para realizar tareas importantes como pruebas de penetración, está claro que muchas personas con poca o ninguna experiencia previa en piratería la están utilizando para sus propios medios, a menudo sin escrúpulos. Por lo tanto, es en gran medida un arma metafórica de doble filo y ese es el defecto fundamental asociado con un Flipper Zero. 

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Por supuesto, los desarrolladores de Flipper Zero insisten en que las personas no deberían usar el producto para manipular dispositivos o sistemas a los que no tienen acceso, pero el genio ya está fuera de la botella en este momento. Después de todo, una vez que a la gente común se le dan los medios para cometer ataques cibernéticos, es muy difícil quitarles ese poder.

Pasando por sacar dinero de cajeros automáticos, forzar la entrada en coches ajenos y echar gasolina sin gastar un solo euro —o los temas más peliagudos comentados anteriormente—, como decimos, depende de hasta donde quieras llegar, pero cuidado porque hablamos de delitos.

"Si lo utilizas para entrar a sistemas, redes o dispositivos sin autorización, o para fines como robo de contraseñas, datos personales, etc. es una acción ilegal y, por tanto, puedes tener serias consecuencias. Si lo usas para espiar a otras personas sin que lo sepan ni te den permiso, estarías violando su privacidad y nuevamente estarías incurriendo en un delito", explican desde el Instituto Nacional de Ciberseguridad de España (INCIBE).

"Es cierto que existen riesgos derivados de su uso al margen de la legalidad, pero cualquier ataque con consecuencias serias que pudiera realizarse con Flipper Zero podría efectuarse también con otras muchas herramientas menos conocidas por el gran público (pero que están disponibles para cualquiera en ciertos foros)", finaliza el experto entrevistado.

Imagen de portada: Blog Flipper Zero