La primera fábrica en el espacio, ya está en órbita
¿Qué sentido tiene fabricar productos a 1.000 Kilómetros de la Tierra? Si son calcetines, posiblemente ninguno, pero si hablamos de medicamentos o tecnología, la cosa cambia...
La compañía privada Varda, con sede en California, acaba de poner el órbita el satélite W-Series 1, que transporta la primera fábrica de la historia en órbita. Su objetivo es fabricar medicamentos en el espacio.
La compañía Varda cree que se puede hacer mucho dinero, incluyendo nuevos medicamentos y patentes, mediante la fabricación en gravedad cero o microgravedad.
Y es que en el espacio, elementos como el fuego, el calor o los líquidos, se comportan de forma completamente diferente. El fuego no genera corrientes de convección, los líquidos no flotan en la superficie de otro líquido, ni se hunden hasta el fondo.
Medicinas fabricadas en el espacio
Estas nuevas condiciones puede dar lugar a nuevos medicamentos, o más eficientes, o con diferentes propiedades, según explica New Atlas.
Pero el aspecto más importante es la cristalización de las proteínas. Los cristales de proteína se cristalizan de forma diferente en el espacio, y se pueden manipular de forma mucho más precisa. Muchos de los medicamentos más caros del mundo podrían fabricarse de forma más eficiente, sin usar aditivos o agentes que mantienen unidos sus diferentes compuestos.
En su primer lanzamiento, Varda ha puesto en órbita, a 1.000 Kilómetros de altura, un satélite que contiene una pequeña factoría, que se va a dedicar a manipular Ritonavir, una conocida droga que usan los enfermos de VIH. La va a calentar y enfriar para estudiar cómo afecta la gravedad cero a su cristalización.
En su segunda misión, prevista para este mismo año, espera fabricar medicamentos por encargo, a nivel comercial.
Varda va a aprovechar también el descenso del módulo de fabricación, para comercializar los datos cuando alcance velocidades hipersónicas, entre los 6.000 y los 30.000 Kilómetros por hora. El gobierno norteamericano ya ha pagado por estos datos. Como vemos, se trata de monetizar la misión al máximo.
La compañía californiana Varda se ha convertido en la primera empresa con pone una fábrica en el espacio, que ya está realizando experimentos con medicamentos, para fabricarlos en su segunda misión. Es un nuevo mercado que, no lo dudamos, se va a extender en los próximos años.
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