Últimamente es habitual encontrarte con términos que mezclan varias palabras inglesas para definir un fenómeno en Internet. Ese es precisamente el caso del engaño conocido como catfishing. En realidad, es algo muy sencillo: personas que aprovechan las redes sociales, aplicaciones al estilo Tinder o herramientas por el estilo para crear perfiles falsos o inexistentes. 

Por eso, aunque cada día es más normal ligar por Internet, cabe la posibilidad de que la persona que te gusta, al menos virtualmente, ni siquiera sea real. ¿Quieres saber cómo detectarlo? Pues aquí te dejamos 5 maneras para saber si tu ligue de Internet no existe. 

Historias que no coinciden

Suele decirse que se pilla antes a un mentiroso que a un cojo, y en Internet aún más. La gente que pone en práctica el catfishing para ligar de manera fraudulenta, por así decirlo, acostumbra a contradecirse en muchas ocasiones. Si eso sucede, puede que estés siendo víctima de uno de estos casos.

Primero, mienten porque, en efecto, la persona a la que interpretan no existen en el fondo, y también porque es posible que mantengan más de una relación a la vez, con la consiguiente dificultad para acordarse de todas las historias que se han inventado en cada caso. 

Una foto demasiado perfecta

Una cara bonita siempre llama la atención, así que es una de las armas que quienes hacen catfishing suelen poner en práctica. Otra de las formas de detectar este engaño pasa por recibir fotos demasiado perfectas. Ya sabes, ese tipo de hombre o de mujer que parece sacado de una revista o de una agencia de modelos… porque seguramente esté sacado de una revista o una agencia de modelos. 

Además, estas personas siempre van a mandarte las imágenes que ellos quieren, no una que tú les pidas en particular, como es lógico. Otra forma de percibir que algo no va bien.

Enamoramiento exprés 

Es verdad que hoy en día las relaciones pueden empezar muy rápido (y también terminar a la misma velocidad), pero otra manera de detectar el catfishing pasa por percibir que el contacto virtual va excesivamente deprisa, que se enamora de manera fugaz. 

Si sucede así, es posible que sus intenciones no sean ni mucho menos honestas. 

Te piden dinero o favores

A diferencia de otros modos de phishing, que no tienen más fin que robar tu dinero o hacer con tus cuentas bancarias, el catfishing puede tener muchos objetivos, incluso simplemente pasar el rato. Pero eso no quita que en ocasiones el creador de la mentira pida cosas, por lo general dinero, pero también ocasionalmente favores. 

Es mejor ser precavido en ese sentido, puesto que no solo perderás el dinero, sino que se lo estarás dando a alguien que no es quien dice ser. 

Pide pruebas de autenticidad

Pese a todo, existen dos maneras de comprobar si estás o no ante un caso de catfishing que no suelen fallar. La primera, evitar las fotos y pedir una videollamada, mucho más difícil de manipular. 

Y la segunda, comprobar su perfil en redes sociales. Si se trata de una persona que liga por Internet, será complicado que no puedas encontrar rastro de él en la red hoy en día. 

Teniendo en cuenta estos consejos, será más difícil que te manipulen y topes con una identidad falsa en Internet. Porque, aunque es una de esas cosas que parece que nunca te pueden suceder a ti, resulta más común de lo que en ocasiones mucha gente piensa.